Según el Daily Mail, el lujo y la ceremonia que se apreciaron en la cena tuvieron un reverso polémico: un enfrentamiento entre el personal de cocina del Castillo y el servicio secreto de Estados Unidos. Tal y como recoge este medio, varios miembros del equipo del servicio secreto que custodiaba al presidente Trump fueron a las cocinas para supervisar la preparación del menú, e incluso probaron la comida, lo que los cocineros consideraron como algo ofensivo.
|
etiquetas: cocineros , windsor , trump , servicio , secreto
Yo si fuera Trump no me fiaba ni del propio servicio secreto.
Qué gente más paleta...
Pues como en la antigua Roma.
A continuación, se sirvió una balota de pollo orgánico de Norfolk envuelta en calabacín con tomillo y zumo salado infusionado con bomba de helado de vainilla y sorbete de frambuesa de Kentish en el interior, decorado con ciruelas escalfadas para terminar.
No me dan ninguna envidia,ni un rodaballo,ni unas almejas de Carril,ni un salpicón de marisco...