El Reino Unido suministra a la Unión Europea servicios financieros por valor de 40.000 millones de euros al año, y el sector constituye casi un 7% del PIB británico. Pero a pesar de ello –o quizás debido precisamente a ello–, ni una sola de las más de 1.200 páginas del recién firmado acuerdo comercial post-Brexit está dedicada al asunto. Todo ha quedado completamente en el aire, con la consiguiente incertidumbre para los operadores. Francia quiere parte del pastel de la City, pero otros países priman la estabilidad.
Comentarios
No tiene ningún sentido que los servicios financieros en la UE se realicen en el extranjero. Creo que el razonamiento está claro, aunque les pese.
#1 exceptuando la evasion de capitales claro...
#4 Has dado en la diana.
Francia es Europa. El Reino Unido no. No hay más preguntas señorita.
>> Francia quiere parte del pastel de la City,
Yo tambien quiero mi parte del pastel ... espero que no tenga que irme a Frankfurt (que es un sitio horrible)
Los mercados financieros aportan muy poco a la riqueza de la economía real. Se basan en la especulación. Cuanto menos se gaste en ellos, mejor. Espero que la salida del Reino Unido de la UE suponga una disminución de los mismos. Si además disminuyera la deuda pública y la deuda corporativa, eso que se ganaba.