Hace 10 años | Por ChanVader a publico.es
Publicado hace 10 años por ChanVader a publico.es

Es el último mohicano de la galdosiana calle del Pez, aorta del patio trasero de la Gran Vía, donde resisten a duras penas un par de negocios de siempre. Casto Herrezuelo (Paredes de Nava, 1938) lleva sesenta años parapetado en la trinchera del Palentino, que no se sabe si es un bar, un café o un museo viviente que, con el paso de las generaciones, ha ido renovando las figuras de los clientes pero conserva inalteradas las de los taberneros.

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ogrydc

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