Hace 9 años | Por Wolandthesecond a eldiario.es
Publicado hace 9 años por Wolandthesecond a eldiario.es

Los sublevados de julio de 1936, inmersos en una orgía de ejecuciones y detenciones masivas, sembraron la provincia sevillana de cárceles improvisadas, incapaces los centros de detención de albergar el creciente número de presos. La oligarquía de la ciudad puso a disposición del "glorioso Alzamiento Nacional" el vapor Cabo Carvoeiro, una prisión flotante que hacinaba a diario en sus bodegas a no menos de 500 personas, muchas de las cuales acabaron fusiladas en las tapias del cementerio.

Comentarios

Mark_

Es terrible el ensañamiento de la Dictadura con Sevilla y con Andalucía en general. Me vienen a la cabeza los fusilados mientras corrían huyendo de Málaga hacia Almería, o la enorme cantidad de fosas comunes que hay y que unos cuantos hijos de puta se empeñan en repetir que son "heridas que no se deben reabrir".

Claro, como que fueron SUS abuelos los que probablemente ordenaron, fomentaron o ejecutaron dichas matanzas...