Hace 8 años | Por gomadós a politikon.es
Publicado hace 8 años por gomadós a politikon.es

Más allá de los efectos inmediatos para el Reino Unido y la Unión Europea de este referéndum (pista: la libra esterlina, ahora mismo, pierde casi un 11% de su valor frente al dólar), la cada vez más aparente divergencia entre los ganadores y perdedores de la globalización es algo que debería preocuparnos.

Comentarios

D

No estoy muy de acuerdo con este comentario. La división interna en UK sobre la permanencia en la CEE y en la UE siempre ha sido muy elevada y su pertenencia muy cuestionada. Recordamos que cuando se creó la CECA, los británicos, que ya tenían su Commonwealth y su EFTA no querían participar y sólo en vista de que el resto de miembros de la EFTA se fueron pasando a la CEE, decidieron solicitar su ingreso. Debido a ese interés puramente económico y no coyuntural, De Gaulle estuvo vetando su entrada tras su NO inicial durante años.

Hay que recordar que el Referendum del 75, donde gano la permanencia en la UE fue aprobado en un momento donde la crisis del petróleo estaba empezando a notarse duramente y donde todavía existía la pujanza del Partido Laborista como partido a lo largo de UK. Todo eso desaparece con las medidas neoliberales de Thatcher, que destruyeron la base social del Partido Laborista. Ahora sólo se recoge lo que se siembra.

Reino Unido siempre ha querido las ventajas de la UE (libertad económica básicamente), pero ninguno de los compromisos restantes, estan siempre muy ligados a Estados Unidos.