Presas del miedo, varias personas se lanzaron por los balcones o los huecos de las escaleras de los edificios tras el temblor. Al menos 20 personas han resultado heridas en las provincias de Argel y Bumerdes, en el norte de Argelia, como consecuencia del pánico desatado por un fuerte terremoto de 5,6 grados de magnitud en la escala Richter registrado esta madrugada.
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El problema no es es seismo, sino las casas no aptas para soportar una cosquilla de la Tierra. Ese "seismo" en Japón sería nada.