Alan Greenspan dio riendo suelta a la exuberancia irracional convencido de que su rol de prestamista de última instancia le permitiría apagar cualquier incendio que se desatara en el sistema financiero. Por eso lo llamaban "El Maestro" pero lo que El Maestro al parecer no sabía era que en su rol de "bombero" estaba apagando el incendio con gasolina
Lo malo de escribir mediante analogías es que puedes dar a entender que todas las consecuencias de la analogía se pueden trasladar a la situación original que intentas explicar y eso es muy peligroso.
Es más peligroso que un tiroteo en un ascensor.
más peligroso que Jesulín en un karaoke.
más peligroso que los Gremlins cantando bajo la lluvia.
más peligroso que Willy Fog con un bonobús.
más peligroso que Espinete vendiendo preservativos.
más peligroso que Mario Conde jugando al Monopoli.
más peligroso que McGyver en una ferretería.
más peligroso que Alf en un anuncio de Wiskas
más peligroso que Eduardo Manostijeras poniendose Hemoal.
más peligroso que el Equipo A en una chatarrería
más peligroso que Dinio en el autobús del INSERSO.
más peligroso que una piraña en un bidé.
más peligroso que Stevie Wonder conduciendo una excavadora.
más peligroso que Espinete bailando el Moon-walker.
...
Alan Greenspan era partidario del patrón oro y encontró en el mercado de derivados la forma de que la iniciativa privada creara dinero de la nada. Nunca creyó en el estado (de hecho era objetivista, seguidor de Ayn Rand) y siempre buscaba la manera de restringir el crédito. De hecho, Bush se quejaba de tener las manos atadas porque no le daba todo el dinero que le hacía falta para sus guerras. Las crisis asiáticas se deben en parte a su política restrictiva.
Decir ahora que las borracheras de crédito se deben a su política económica es cuando menos un error de base.
Comentarios
Lo malo de escribir mediante analogías es que puedes dar a entender que todas las consecuencias de la analogía se pueden trasladar a la situación original que intentas explicar y eso es muy peligroso.
Es más peligroso que un tiroteo en un ascensor.
más peligroso que Jesulín en un karaoke.
más peligroso que los Gremlins cantando bajo la lluvia.
más peligroso que Willy Fog con un bonobús.
más peligroso que Espinete vendiendo preservativos.
más peligroso que Mario Conde jugando al Monopoli.
más peligroso que McGyver en una ferretería.
más peligroso que Alf en un anuncio de Wiskas
más peligroso que Eduardo Manostijeras poniendose Hemoal.
más peligroso que el Equipo A en una chatarrería
más peligroso que Dinio en el autobús del INSERSO.
más peligroso que una piraña en un bidé.
más peligroso que Stevie Wonder conduciendo una excavadora.
más peligroso que Espinete bailando el Moon-walker.
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Alan Greenspan era partidario del patrón oro y encontró en el mercado de derivados la forma de que la iniciativa privada creara dinero de la nada. Nunca creyó en el estado (de hecho era objetivista, seguidor de Ayn Rand) y siempre buscaba la manera de restringir el crédito. De hecho, Bush se quejaba de tener las manos atadas porque no le daba todo el dinero que le hacía falta para sus guerras. Las crisis asiáticas se deben en parte a su política restrictiva.
Decir ahora que las borracheras de crédito se deben a su política económica es cuando menos un error de base.
Buen artículo