Hace 8 años | Por zfernando a elplural.com
Publicado hace 8 años por zfernando a elplural.com

Emilio Menéndez y Carlos Baturin se casaron hace diez años en la localidad madrileña de Tres Cantos, pasando a la historia como la primera pareja del mismo sexo que pudo casarse en España gracias a la entonces recién aprobada ley del matrimonio homosexual que, una década después, ha avalado 31.610 enlaces...

Comentarios

Bowsers

Y el mundo sigue rodando...

D

#1 no estarás insinuando que la tierra es redonda, no? hereje sodomita!!!

x

#1 #2 Y ni se ha acabado la familia, ni los heterosexuales hemos perdido ningún derecho, ni se han abierto los cielos para verter azufre y fuego, ni nadie se ha convertido en estatua de sal... Vaya chasco...

D

#1 Y todavía no han obligado a nadie a casarse con otro de su mismo sexo.

ElPerroDeLosCinco

Yo en este tema no puedo ser imparcial. Por un lado, defiendo que los gays tengan los mismos derechos que los demás. Pero por otro, aborrezco las bodas. Suelen sacar lo más chusco del ser humano, sea hetero o gay, que de todo he visto. Por no mencionar que en cualquier boda, si te dicen que hay por ejemplo 50 o 70 invitados, es mentira. En una boda siempre hay el mismo número de invitados: dos. Concretamente los dos novios. El resto de la peña se paga su cubierto en forma de regalo o aportación económica directa. Los únicos que salen a pachas y a menudo ganando pasta son los novios. Lo que más me jode es que a menudo, la pareja que se casa ya lleva viviendo junta varios años y tienen la casa amueblada, y el banquete se lo pagan sus padres. Pero aun así lo que quieren es que les hagas un regalo en dinero para pegarse el peazo viaje a Tailandia.

Bowsers

#5 La cosa es que hasta hace 5 años yo no tenia ese derecho (de forma lega) y ahora si. Tampoco es que me gusten mucho las bodas.

LuisPas

#5 depende de la boda, como yo me casaba lejos les dije que no queriamos regalo, que en el viaje ya se dejaban una pasta...

D

#0 La conclusión (dado el escaso número de enlaces) es que el “matrimonio” como pareidolia del matrimonio normativo del heteropatriarcado opresor no es algo suficientemente atractivo para el “colectivo” al que iba dirigido en principio este derecho fundamental en teoría de una, y efectiva, por supuesta, igualdad.

Podría haber sido de otra manera: Tal vez, se diversificase en elaborar elecciones diferentes, para lo cual es tarde: si quieres ser aceptado debes ser "como nosotros", los heteronormativos, herederos del Derecho y del “bien común”. Como, es un ejemplo, uniones de iguales entre iguales, sin las martinagalas del tipo «quién es la parte débil del matrimonio y cuál es la fuerte», pues desde que el mundo es mundo el amor y sus cálculos, se acaban y nadie puede decir" “de esta agua no beberé”, y ayer te amé y hoy sólo eres mi “ex”, “lo dice un juez” y lo más absurdo: Todo ello en la más falsa de las burocracias. Las intromisiones del estado en las relaciones interpersonales adultas y consensuadas: La de los papeles en un juzgado.

Much ado about Nothing para la libertad de verdad.

Sobre las cifras. No estando el todo de acuerdo con las conclusiones del enlace, no viene mal, nunca, leer cosas por ahí. http://www.cronicas.org/cm_armario.htm