Los indicios no superaban el umbral mínimo para descartar explicaciones alternativas. Por eso tanto la Fiscalía como la Abogacía del Estado pidieron la absolución. La lógica jurídica apuntaba a un destino inequívoco: la absolución; la lógica del poder ha impuesto otro.
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A por ellos que son pocos y cobardes.
Comunistas eran Fidel y Tito. ¿Dónde están las expropiaciones a los latifundistas? Y a la iglesia? Y las colectivizaciones industriales y agrarias?Tampoco veo hoces y martillos en las instituciones, ni imponentes estatuas brutalistas con los lemas del partido. Hasta que eso no llegue... ¡esto ni es comunismo ni es ná!
es que ya se acaba el día.
Si cantara el gallo rojo
otro gallo cantaría.
Hay dias que es mejor no levantarse