Hace 5 años | Por --555203-- a elespanol.com
Publicado hace 5 años por --555203-- a elespanol.com

Los ladridos eran la banda sonora habitual que manaba más allá de los muros de la mansión de Angela. Ella, una millonaria estadounidense afincada en las colinas de Torremolinos (Málaga), tenía una debilidad, un amor que le brotaba a borbotones, sin mesura: sus perros. No era uno, ni dos, ni tres. Llegó a tener 125 canes de manera simultánea. La mayoría de ellos, de raza cocker. Incluso montó una asociación en su defensa: La Pacaraima.

Comentarios

kumo

Esas perreras deberían desaparecer.

jamma

También, si todos los animales de Ángela siguieran vivos, tendrían algunos “más de 25 años”, relatan fuentes municipales. “Los trabajadores que tenía viven a costa de los perros. Y ahora viven con el patrimonio que los perros no utilizan, porque tienen su sueldo de mantenerlos. Están reponiendo los perros para seguir viviendo del cuento”.

D

Me hace mucha gracia el hincapié que hacen con que los perros no tienen electricidad por la noche.

Todo el artículo es un despropósito, empezando por la vieja rica chocha y terminando por los perros sufriendo pobreza energética y sin colchones de viscoelastica.