Hace 6 años | Por Cachopín a ieturolenses.org
Publicado hace 6 años por Cachopín a ieturolenses.org

En el mes de junio de 1966 –es decir, casi exactamente un año antes de que comenzase el autoexilio de Ángel Crespo y cuando éste llevaba veinte participando de una manera muy activa en la vida literaria española cuyo negro aislamiento de la posguerra había contribuido a oxigenar no solamente con su poesía sino también con su crítica de arte y literatura, sus traducciones y las revistas que había dirigido o codirigido. Los años 60 habían sido los de la lucha por el realismo en que se embarcó una buena parte de los poetas españoles que se contaban entre los opositores a la dictadura franquista y Ángel había participado de una manera a la vez intensa y peculiar en esta batalla.