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#2:
Verdades como puños, en vena. Cuando nos sentimos afligidos por la angustia y la inseguridad no responsabilizamos a la sociedad, sino a nosotros mismos. Pero el fermento de la revolución es el dolor sentido en común. El dispositivo neoliberal de felicidad lo ataja de raíz. sociedad paliativa despolitiza el dolor sometiéndolo a tratamiento medicinal y privatizándolo. De este modo se reprime y se desbanca la dimensión social del dolor. Los dolores crónicos que podrían interpretarse como síntomas patológicos de la sociedad del cansancio no lanzan ninguna protesta. En la sociedad neoliberal del rendimiento el cansancio es apolítico en la medida en que representa un cansancio del yo. Es un síntoma del sujeto narcisista del rendimiento que se ha quedado desfondado. ... El cansancio del yo es la mejor profilaxis contra la revolución.
#8:
"El último reducto de libertad que nos queda en este sistema es el concepto propio que tenemos de felicidad", Sampedro. Precisamente el neoliberalismo quiere vendernos un concepto único e inamovible de "felicidad", para estandarizar los modelos de vida. La felicidad, antes relacionada con la libertad por propia definición, es una nueva dictadura. De eso también ha hablado muchas veces Han. Los libros de autoayuda, las charlas TED y otras tantísimas cosas funcionan como elementos aglutinadores del concepto que tenemos de la felicidad. Se trata de convertir en mantra inamovible la esencia del capitalismo: si eres feliz es gracias al sistema, si eres infeliz es por tu culpa. Socializar el éxito y la felicidad. Individualizar el fracaso y la tristeza. Somos culpables únicos de todo lo malo. El sistema te lo da todo, si no eres feliz es TU PROBLEMA. Ese es el discurso que ha perdido la izquierda y que ha ganado la derecha. La propia clase obrera se ha acogido a él de forma plena.
#31:
#28 contar una vida es lo que se hace en instagram o facebook: el restaurante, el viaje, el coche nuevo, el tiempo que he tardado en hacer 5 km (cabronazos runners)...pero ¿contar sentimientos? No lo tengo muy claro. Y Hun ha hecho referencia en numerosas ocasiones a la importancia del que escucha. ESCUCHA. Cuando tu escribes algo en una red social puede que muchos te lean, pero esucharte, es probable que no te esté escuchando nadie. En una conversación de tú a tú, con un amigo, con un familiar, la cosa cambia (a veces).
Comentarios
Verdades como puños, en vena. Cuando nos sentimos afligidos por la angustia y la inseguridad no responsabilizamos a la sociedad, sino a nosotros mismos. Pero el fermento de la revolución es el dolor sentido en común. El dispositivo neoliberal de felicidad lo ataja de raíz. sociedad paliativa despolitiza el dolor sometiéndolo a tratamiento medicinal y privatizándolo. De este modo se reprime y se desbanca la dimensión social del dolor. Los dolores crónicos que podrían interpretarse como síntomas patológicos de la sociedad del cansancio no lanzan ninguna protesta. En la sociedad neoliberal del rendimiento el cansancio es apolítico en la medida en que representa un cansancio del yo. Es un síntoma del sujeto narcisista del rendimiento que se ha quedado desfondado. ... El cansancio del yo es la mejor profilaxis contra la revolución.
#2
Disfrutar a costa del dolor de otros, me suena...
#2
https://serhistorico.net/2019/03/05/king-kong-y-la-dictadura-de-la-felicidad/
#2 Lo cierto es que el artículo está lleno de reflexiones con mucha enjundia. ¡Gracias por el aporte!
"El último reducto de libertad que nos queda en este sistema es el concepto propio que tenemos de felicidad", Sampedro. Precisamente el neoliberalismo quiere vendernos un concepto único e inamovible de "felicidad", para estandarizar los modelos de vida. La felicidad, antes relacionada con la libertad por propia definición, es una nueva dictadura. De eso también ha hablado muchas veces Han. Los libros de autoayuda, las charlas TED y otras tantísimas cosas funcionan como elementos aglutinadores del concepto que tenemos de la felicidad. Se trata de convertir en mantra inamovible la esencia del capitalismo: si eres feliz es gracias al sistema, si eres infeliz es por tu culpa. Socializar el éxito y la felicidad. Individualizar el fracaso y la tristeza. Somos culpables únicos de todo lo malo. El sistema te lo da todo, si no eres feliz es TU PROBLEMA. Ese es el discurso que ha perdido la izquierda y que ha ganado la derecha. La propia clase obrera se ha acogido a él de forma plena.
#8 para estandarizar los modelos de vida
Imponer estándares es una forma de tortura, aunque no se note el dolor ni la alienación; la muerte llega! la del pensamiento y la del cuerpo. A veces pasan años entre una y otra...
Este hombre hace uno de los ánalisis más certeros de la sociedad actual. Leerle da una desazón enorme y no leerle es vivir en la inopia.
#14 A mí leerle no me da desazón ninguna. Lo que me la da es VIVIR en esta sociedad que él tan bien define. Sus palabras dan forma, en parte, a mis pensamientos y sentimientos; eso me ayuda; pero es personal, claro está.
hay Bynchulhan hay meneo!
#4 donde esta mi grafeno del día??!?!
Interesante, me ha recordado a la película surcoreana "Parásitos".
desarrolla una postura de rechazo hacia el dolor. Le parece que el dolor carece por completo de sentido y de utilidad
Tal vez no está directamente relacionado, pero os lo cuento. El otro día nos enteramos que en cierta escuela, una niña cayó desde el 2 o 3er piso y se fracturó la cabeza. Las causas no están claras, pero conversando con un graduado de la misma escuela, me llamó la atención que preguntara si fue un accidente o intencional, que cuando él estaba hubieron un par de casos de personas que saltaron como si fuera lo más natural del mundo. No pude evitar asociarlo a madres sobreprotectoras de esas que ponen cascos acolchados a sus retoños, esquineros acolchados en mesas, sillas, etc. y que ese tipo críos crecen con poca experiencia práctica de los peligros físicos del mundo.
#3 Hmmm. Siempre me lo he preguntado. Tuve una gata que se crió de pequeña en casa. Nunca una caída o accidente por alturas. La cosa es que le gustaba mucho que la cogieras y si pasabas por delante de la ventana, cerrada, se ponía tensa de la leche.
Instinto tenía para saber que era peligroso, porque experiencia cero. No sé si en los humanos se diluye.
#16 Tal vez ya era así de nacimiento. Tengo un perrín que fue críado en un piso hasta que nos mudamos a una casa en un barrio residencial. Al principio, prefería pasársela afuera con los demás perretes; la circulación de coches es bajísima, pero a pesar de eso era como si pensara que los coches debían frenar cuando él cruzara la calle. Casi fue arrollado 3 veces, la tercera la más grave, no tuvo lesiones pero pegó un grito, escapó, y no volvió hasta 10 horas después. Desde entonces prefiere quedarse en casa y sabe que cuando hay coches, no debe cruzar. Lo cierto es que podría haber muerto.
«En vísperas de la crisis económica mundial de los años veinte, con sus extremas contradicciones sociales, había muchos representantes de trabajadores y activistas radicales que denunciaban los excesos de los ricos y la miseria de los pobres. Frente a eso, en el siglo XXI una camada muy distinta y mucho más numerosa de ideólogos propagaba lo contrario: que en nuestra sociedad profundamente desigual todo estaría en orden y que a todo aquel que se esforzara le iría muchísimo mejor. Los motivadores y otros representantes del pensamiento positivo traían una buena nueva para las personas que, a causa de las permanentes convulsiones del mercado laboral, se hallaban al borde de la ruina económica: dad la bienvenida a todo cambio, por mucho que asuste, vedlo como una oportunidad».
Un mundo infeliz a la vuelta de la esquina.
#10 no sabía que este era feliz.
El sufrimiento es bueno . Vale.
Me parecen unas ideas muy conservadoras las de este filósofo
tru.
ño.
Los que salen al escenario ya no son los revolucionarios, sino unos entrenadores motivacionales que se encargan de que no aflore el descontento, y mucho menos el enojo: «En vísperas de la crisis económica mundial de los años veinte, con sus extremas contradicciones sociales, había muchos representantes de trabajadores y activistas radicales que denunciaban los excesos de los ricos y la miseria de los pobres. Frente a eso, en el siglo XXI una camada muy distinta y mucho más numerosa de ideólogos propagaba lo contrario: que en nuestra sociedad profundamente desigual todo estaría en orden y que a todo aquel que se esforzara le iría muchísimo mejor. Los motivadores y otros representantes del pensamiento positivo traían una buena nueva para las personas que, a causa de las permanentes convulsiones del mercado laboral, se hallaban al borde de la ruina económica: dad la bienvenida a todo cambio, por mucho que asuste, vedlo como una oportunidad».
No puedo estar más de acuerdo con esto. Básicamente es lo que representa la izquierda posmoderna el "buenismo", sin volver a la lucha de clases sociales. Y también los que nos quieren vender que este capitalismo que permite precisamente ese desequilibrio entre ricos y pobres, es bueno, poniéndonos cuatro gráficas y separando la pobreza de la pobreza extrema, para hacernos creer que el mundo va mejor de lo que realmente va. Evidentemente también son los privilegistas; los que apoyan los privilegios de esos ricos.
Saludos.
Muy interesante, dice lo que Tyler Durden, pero sin bombas de fertilizante y gasoil.
#27 además se contradice constantemente
"Constantemente se nos incita a que comuniquemos nuestras necesidades, nuestros deseos y nuestras preferencias, y a que contemos nuestra vida." Y luego "no quieren que mostremos nuestros sentimientos". No se rick no me huele limpio
#28 Tal vez sea muy denso para tí, no pasa nada.
#28 contar una vida es lo que se hace en instagram o facebook: el restaurante, el viaje, el coche nuevo, el tiempo que he tardado en hacer 5 km (cabronazos runners)...pero ¿contar sentimientos? No lo tengo muy claro. Y Hun ha hecho referencia en numerosas ocasiones a la importancia del que escucha. ESCUCHA. Cuando tu escribes algo en una red social puede que muchos te lean, pero esucharte, es probable que no te esté escuchando nadie. En una conversación de tú a tú, con un amigo, con un familiar, la cosa cambia (a veces).
#31 es como leer libros o entender los conceptos de los mismos.
Leer información o procesar la información.
Usar la tecnologia o entender la tecnologia.
Escuchar o lograr generar empatia. Ver una vidriera, los trofeos de ps4 o conectar profundamente con el otro.
#35 claro y el problema es no empezar a entender esa enorme diferencia entre las dualidades que planteas.
#28 a ver.el autor no está invitando a todos a ser disciplinados y trabajar mucho. Se refiere a que el mecanismo de control social ha pasado del “trabajad trabajad y sed disciplinados porque sino os voy a hacer daño” al más elegante “sed felices y huid del dolor” (implícitamente si no trabajas no serás feliz y viceversa y te vas a hacer daño tú solo. Trabajo/rendimiento=felicidad en ambos sentidos). En ese sed felices y huid del dolor hay muchas similitudes con la tesis de Weber y Tawney del protestantismo como cuna del capitalismo. El protestante dice qué hay unos elegidos que van al cielo y se les reconoce porque trabajan mucho (no es que trabajando vayas al cielo, sino que los “elegidos” trabajan mucho). Aquí sería parecido. La gente de éxito rinde mucho, y se nos invita a autoexplotarnos para tener “éxito” y mostrarlo.
No hay contradicción con decir que contemos mucho de nuestra vida y nuestros deseos, pero que no hablemos de nuestros sentimientos. Debemos mostrar al mundo nuestra felicidad y nuestros deseos hedonistas. Hablar de nuestro sufrimiento sería “confesar” que no somos exitosos. Esto equivale a confesar nuestro fracaso porque el éxito depende de nosotros. Entonces, si hace algunos siglos el sufrimiento se compartía y comunicaba transformándose en revolución hoy se esconde y autoinculpa transformándose en depresión.
#33 un inception de mecanicas sociales de los creadores de sé tu propio jefe, "si se quiere se puede", sí no lo lograste es que no lo intentaste lo suficiente, etc.
Y obviamente sponsoreado por las farmaceuticas de siempre.
#28 Más bien lo que viene a decir es que la moto que nos venden es la de la sociedad de cero contrariedades, todo hedonismo, no existe el dolor... Cuando el hacerse persona consiste en que haya contrariedad, cosas que te dañan, desengaños y putadas que otros te hacen.
La búsqueda de la felicidad es humano, pero la felicidad, tal y como la entiende Han, es algo más profundo. Es un filósofo que habla mucho de la ansiedad que plantea el que no podemos llegar a los estándares de felicidad que se identifican con unos ideales de lo más superficial.
En la Sociedad del cansancio plantea que estamos hechos mierda, pero obsesionados por la "positividad" por el todo va guay, aunque no paramos de currar y consumir.
#34 y en la sociedad de la transparencia de que todo tiene que ser como dice el titulo, aunque para ello tengamos que ser vacios, inocuos, transparentes, desde lo politico hasta lo cotidiano.
¡Eureka! Acabo de entender el mensaje de la famosa frase de Ayuso.
mejor ser infeliz, dónde va a parar
Y luego tenemos vendeburras cojas como éste. La Psicología Positiva:
Como análisis bastante de acuerdo, como diagnóstico del orígen no. Pienso que el orígen de este cambio está en el ejercicio de la psicología no en el neoliberalismo. Después, como instrumento se utiliza en varios ámbitos. Por ejemplo, los estudios psicológicos influyen en la educación, ya que la psicología infantil tiene mucha influencia en la pedagogía.
La psicología también define las estrategias de motivación, tanto en empresas como en países, que al final repercuten en la productividad.
Nunca verás un psicólogo que intenta tomar medidas para que la sociedad sea mejor. Siempre se centra en la felicidad del individuo. Lo que importa es que "su cliente" se sienta feliz, independientemente de cómo se sienta el resto, y mas aún si el resto no es su enterno cercano, ya que éste no afectará en su felicidad.
A ver, es una recomendacion. Nadie tr 9bliga a serlo
La felicidad no es ética
#9 pero es estética.
Panfleto. Seremos como el pais del autor (corea del sur) que van camino de convertirse en el nuevo japón. Y no es que prefiera vivir como los japoneses con sus tasas de suicidio
#1 el autor no comparte la filosofía y sistema que impera en su país. Para panfletario, tu comentario (sorry por la rima).
#6 #18 "Le parece que el dolor carece por completo de sentido y de utilidad. El actual sujeto del rendimiento se diferencia radicalmente del sujeto disciplinario.". Qué quieres que diga, a mi me parece que está en plan: el dolor os hará fuertes, sed disciplinados y trabajad, trabajad, trabajad. Es lo que yo interpreto
#1 Bueno, el tío en cuestión vive en Alemania hace décadas, tiene nacionalidad alemana y escribe en alemán.
Vamos, que muy vinculado a Corea no lo veo yo...
#1 El país del autor es Alemania. Allí imparte clases de filosofía y allí ha escrito todos sus libros. Del mundo del que habla es del tuyo.
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