Estaba el otro día en una tienda a modo de relax ya que hace las funciones de parque de atracciones para gente como yo (y que, para no hacer publicidad, llamaré Meroy Lerdín) cuando se me acerca un caballero de mediana edad, vestido con ropa casual, gafas de pasta y tablet en mano. Con mis atención puesta en las brocas de cobalto, su "buenas tardes" perfora mi concentración. Lo que viene después, taladra mi momento de paz.
"¿Conoce usted las últimas ofertas de Iberdrola en el mercado de la electricidad?"
Después de un par de poco amistosos "no me interesa, gracias" y "le repito que no me interesa, gracias", avanzo unos pasos hacia los tornillos autoperforantes cuando recibo una llamada a mi móvil de uso personal. "No conozco este número, pero parece legítimo", pienso antes de descolgar para encontrarme con la voz de un comercial de Vodafone, al que no doy tiempo de terminar de lanzar su propuesta.
En cuestión de minutos, lo que estaba siendo un momento de desconexión tras una semana de mucho trabajo, se vió invadido por los intereses particulares de terceros, buscando presas bajo un camuflaje muy sibilino, difícil de detectar cuando se tiene la guardia baja.
La avalancha de publicidad y propaganda es tan intensa e imparable que la gente, cada vez más, y como si fuese algo innato o incrustado en nuestro código genético esperando el momento de necesidad para manifestarse, está desarrollando filtros para neutralizar, ignorar o invisibilizar al cerebro dicha publicidad. Hay quien, viendo el televisor, se levanta del asiento o agarra el mando a distancia justo tres o cinco segundos antes del corte publicitario. Como si llevara un temporizador mental de cuándo tocan anuncios. Otros navegan por Internet sin ningún tipo de filtro de publicidad y sin que parezca importarles pues su cerebro parece que tapa todo banner y anuncio con una imagen en negro, con un biombo imaginario que tapa el cartelón virtual. Caray, hay gente que incluso sabe cuándo está recibiendo una llamada comercial ¡por la hora! Y no les hace falta ni mirar el reloj ni el número de teléfono, sólo valorar la intensidad de la luz solar para averiguar que está siendo reclamado por los agentes de telemarketing de turno.
Por eso, la publicidad y la propaganda se ha sofisticado para engañar a este nuevo sentido de supervivencia. Y como buenos depredadores (o supervivientes, según se mire), la técnica más efectiva es el camuflaje, concebido de una forma en que ya no se trata de estar ahí y pasar desapercibido, sino de hacerse notar pero disfrazado de otra cosa. Lo subliminal se lo llevó el retrete hace tiempo; lo que se tercia ahora es atizarte con un bate de beisbol en plena frente pero que creas que ha sido con una rama de olivo.
En el extenso bosque que es Internet, es más fácil engañar al ojo del visitante ocasional si uno sabe vestirse adecuadamente y se mueve rápido entre troncos y arbustos. Para el habitual, que trepa árboles con soltura y distingue los cantos de las diferentes aves, es más difícil que sea engatusado. No hablemos ya del que se pone a hacer picnic a la entrada de una osera porque sabe por los zurullos que el oso está en la otra punta del monte.
La diferencia entre los bosques y los medios de comunicación es que el bosque tiende a erigirse y coger forma según la localización y el clima, mientras que los medios de comunicación simulan un bosque con árboles de cartón-piedra y demás vegetación de plástico, con ratas disfrazadas de ardillas y lobos vestidos de cervatillos. Esos programas aparentemente informativos y estas tertulias están diseñadas para que creas que su bosque, aun siendo falso, artificial y repleto de mentiras, es el bosque más frondoso, el único que da buen frescor y buena sombra, y que el resto de bosques está lleno de alimañas y malas hierbas, y no pasa nada (incluso sería convieniente) si un incendio se los lleva por delante.
Esos expertos diseñadores de exteriores también trabajan en Internet, y utilizan las mismas estratagemas, contenidas todas en el nuevo libro de la publicidad y la propaganda. Poco a poco han ido tomando el bosque original, han ido talando los árboles que, según ellos, afeaban la vista, y plantado los que más les conviene a ellos, introduciendo especies invasoras que sepan convivir entre ramas reales y de poliuretano.
Debido a todo ello, la Web 2.0 actual es una reminiscencia de lo que se supone que iba a ser. Y ningún sitio se salva. Ni Facebook, ni Twitter, ni TikTok, ni Instagram, ni Reddit ni, por supuesto, Menéame. Porque el gran problema de este camuflaje, de este escenario artificial, es que los mencionados diseñadores se basan en la premisa de que nadie en su vida ha visto un bosque real. Y es que se suele acusar a las redes sociales de funcionar como cámara de eco; la realidad es que el eco es mucho más fácil de reproducir cuando cascas veinte muros de hormigón colocados convenientemente entre quien emite el mensaje y quien lo recibe. La pregunta es: ¿desde cuándo hemos tomado como algo natural que existan veinte muros de hormigón en medio del bosque?
Si usted se da un paseo por Twitter y presta un poco de atención, verá un patrón bastante habitual. Quinientas cuentas entrelazadas, bien por seguidores, bien por compartición de contenidos, bien por feedback. De esas quinientas cuentas, veinte son generadoras de contenido, y todas tienen un interés: vender un libro, ganar suscripciones, conseguir votos para un partido político, encender el candelero para ser invitado a otros medios. Cuatrocientas de esas cuentas se limitan a retuitear, a repetir consignas o a molestar de manera simple con comentarios simplistas a sus adversarios; comparten una biografía casi idéntica, son absolutamente monotemáticas y no tienen más interacción positiva que la que ocurre dentro de su red endogámica. El resto de cuentas son usuarios reales, bien con comentarios esporádicos o porque creen pertenecer a una red de personas reales que comparten una forma de pensar.
Si usted se da un paseo por Youtube, en lo que se suelen llamar los "canales ideologizados" (es decir, que son prácticamente monotematicos en el apoyo y destierro de una u otra ideología política) encontrará que su sección de comentarios está trufada de pocos comentarios que inviten al debate y cientos de comentarios que parecen sacados de una plantilla ejecutada por algún bot. Si mira las estadísicas de los vídeos de dichos canales, se dará cuenta enseguida de que el número de comentarios, el de visualizaciones, el de suscripciones y el de "me gusta" no concuerda unos con otros. La sensación es la de ver un Ferrari con el motor de un Dacia alimentado por queroseno recorriendo el trayecto entre Almansa y Volgogrado en menos de tres horas.
Menéame no es una excepción y, curiosamente, su bajo número de usuarios activos (comparado con otras redes sociales) hace mucho más evidente este hecho.
Cualquiera que pase cierto tiempo en esta web habrá percibido ciertos usuarios, cuanto menos, "curiosos" a la hora de aportar contenido. El que sólo menea noticias que pueden perjudicar a la iglesia católica; el que sólo menea noticias opuestas a la OTAN o a "occidente" (muchas veces, de fuentes oscuras o difíciles de encontrar salvo que se pertenezca a un RSS muy específico o se dedique en cuerpo y alma al análisis de esas noticias); el que menea cualquier noticia contraria a los postulados feministas o al Ministerio de Igualdad (y su contraparte del que sólo menea noticias relacionadas con sucesos plausibles de tener un origen machista); el que prácticamente menea el feed de Twitter de un político de cierto partido político (y su contraparte del que pŕacicamenre sólo menea artículos contra el político de cierto partido político). También están los que sólo menean sucesos en los que cuyo presunto culpable es de procedencia extranjera o de cierta etnia, o los que menean contenido de fuentes extremadamente similares, o los que menean contenido en vistas a regionalismos o nacionalismos...
Pero si uno dedica un poco de tiempo a utilizar las funcionalidades de esta web, observará cosas, también, muy "curiosas". Por ejemplo, que en los primeros cincuenta votos positivos a meneos con fuente en ciertas páginas web, los nombres de los usuarios coinciden con otros tantos meneos con la misma fuente; que en los primeros cincuenta votos positivos a meneos de ciertos usuarios, coinciden plenamente con los votos positivos de otros meneos de los mismos usuarios. Con una variación de tiempo ridícula, muchas veces inferior al tiempo de lectura o visionado al meneo. Sí, efectivamente, huele a coordinación de votos.
Y si nos vamos al campo de los votos negativos, es muy similar. De los meneos con más de veinte negativos, existe una posibilidad muy elevada de que la mayoría (>50%) proceda de los mismos usuarios.
Y por último, el de los comentarios, y el que más llama la atención: hay una posibilidad del 100% de que una cuarta parte de los primeros 20 comentarios de un meneo proceda de los cincuenta primeros usuarios en menear un artículo. Ésto no sería raro si no fuese porque ocurre antes de que el meneo aparezca en la portada, y siempre en los subs de actualidad y política, o en la cola de pendientes. Un extraño circlejerk de opiniones y karma.
Ésto da lugar al habitual ambiente enrarecido, en el que todo el mundo acusa a todo el mundo de pertenecer a "comandos", a "canales de información privados". Una guerra de guerrillas que ensucia la comunidad e invita a salir corriendo, más cuando cualquier comentario crítico con la base del artículo es fundido a negativos y su usuario acosado y llamado mil nombres poco agradables. No existen los ex-votantes de un partido político, todos los moros son violadores, Errejón es poco menos que Judas, si criticas a la izquierda eres facha o equidistante, y si criticas a la derecha eres podemita o apesebrado.
Mención especial merecen los usuarios que de disfrazan de todo lo contrario que representan; una especie de contrapropaganda con la intención de generar irritación y repulsa contra la ideología que aparentan representar. Se distinguen porque cumplen al 150% con el ideario del que simulan ser, muchas veces hasta cuotas ridículas, y ser extremadamente faltones, falsarios, tergiversadores y nulos al debate. Aparecen en los primeros comentarios para tildar a todos los hombres de machistas, a defender de forma velada el fascismo, a promover independencias unilaterales o directamente a insultar de forma aparentemente elegante a todos los meneantes, ya sean positivizadores o negativizadores, de un meneo.
Y la pregunta fundamental es: ¿quién está detrás de ésto?
Pues además de los usuarios fanáticos (o simplemente de fuertes e inamovibles convicciones que habría que analizar con un cuadro de psiquiatras expertos) están los cibervoluntarios, alguien que de una forma u otra pertenece (o cree pertenecer) a las estructuras de una organización o partido político y se dedica a la propaganda en redes. También están las agencias de publicidad, contratadas por dichas organizaciones o partidos políticos, en las que por cuatro duros te ponen a alguien haciendo proselitismo en las redes a tiempo completo (compartido con otros quehaceres). Y por último están los "troles", gente con mucho tiempo libre cuya fuente de dopamina consiste en dar por culo virtualmente.
Volvamos a Meroy Lerdín. Uno decide pasar la tarde entre palas de jardinería y pinturas de exterior, quizá buscando la inspiración que le lleve de nuevo a realicatar el cuarto de baño, y se encuentra con que el resto de clientes o visitantes... quizá no sean clientes ni visitantes normales.
"Ese taladro consume mucho, y con las tarifas que tiene Endesa te arruinas". "Oiga, puede mirar el catálogo online, pero sólo si tiene Orange, porque aquí es la única cobertura que funciona". "Esos grifos son muy buenos; están hechos en España". "Esos marcos para puerta parecen para la casa de un facha". "Si no compra una Dremel es que nunca ha probado una Dremel". "Con esa silicona le entra toda el agua; lo mejor es cemento Portland".
¿Y dónde están los encargados? Probablemente sentados en un minidespacho, intentando cerrar el pago a plazos de una cocina. ¿Y los cajeros? Pague usted por sí mismo en una de esas maquinitas. ¿Tiene ya el carnet del Club Lerdín? "¡Me cago en dios! ¿Qué coño pasa en esta tienda?", gritaba el cliente mientras un guardia de seguridad lo echaba a patadas por levantar la voz.
Y quien tenga las espaldas anchas puede que siga visitando la tienda de cuando en cuando, pero quien no, se restringirá a la ferretería del barrio, en la que sabes donde vive el tendero y si te tima le puedes dar una hostia. O se limitará a ver Bricomanía para pasar el rato. Esos sí que son productivos, que te construyen una piscina en menos de dos horas.
Comentarios
Buen articulo #0
El problema no es Internet, el problema son las personas. No hay remedio.
#2 También. He escogido ese título para el artículo porque, según otros artículos recientes, pareciera que Menéame es la única web que tiene esos problemas, cuando TODA la Internet está igual. Y ninguna web sabe poner solución.
#4 es que no hay solución posible. Internet es un negocio para algunas personas, personas están detrás de la moderación en Tuiter, Fb, Tick Tock y el coño de la Bernarda.com y por encima de esas personas hay otras personas. La mala educación está más asentada en Internet que en la vida real. Es así. Ni a la japonesa se va a evitar.
Japón enviará a prisión a quienes insulten personas en internet
Japón enviará a prisión a quienes insulten persona...
hipertextual.com#5 Bueno, eso de que no hay solución posible... En todo caso hay soluciones que no se quieren usar por ser, tal vez, demasiado brutas.
Con una herramienta chorra de big data se podrían sacar todos los datos quecarademalo ha sacado a "ojímetro" sobre votos, karma, comandos organizados de votos, comentarios, etc. Son patrones que están a la vista de todos y que no se molestan en ocultar (pero que casi nadie se molesta en buscarlos).
Una vez encontrados estos grupos podrían... ¿Ser suprimidos? No me refiero a enviarles un sicario a casa, pero otras cosas sí.
Claro, a ver quién pone en marcha esa solución sin que se lo coman vivo y, sobre todo, sin que paguen inocentes por pecadores.
PD: Del resto de Internet fuera de Meneame ni opino, creo que es una batalla perdida en casi todos los casos.
#26 el problema es que no compensa. A los dueños de menéame (y todos los demás sitios financiados con publicidad) les interesa la controversia, no el debate racional, porque la controversia vende clicks e impresiones de pantalla.
#26 a mí se me ocurren cosas muy retorcidas con la IA, como por ejemplo una vez catalogue al tipo de usuario, le muestre una página de comentarios limitada, o con una conversación totalmente desarrollada por la IA... Me da por pensar que en un futuro no muy lejano no vamos a poder diferenciar de un usuario IA de otros o incluso de que la conversación que se nos muestra sea "adaptada" al lector. Una especie de show de Truman generado por IA para cada usuario.
Sobre el artículo decarademalo, me ha parecido muy bueno, me ha gustado leerlo, pienso que atina bastante.
#4 Felicidades, casi estoy de acuerdo con todo. Pienso que todos en más o menos medida tenemos algo de culpa.
Pero dime quien se resiste ante cualquier noticia que genere debate llevar la razón, y de ahí a envenenar el ambiente hay un paso.
#4 Te voy a hacer dos pregúntame.
¿Has caído en la desgana (como a mí me pasa últimamente) cuando utilizas internet? Que entro en 4 webs intentando buscar respuesta a una curiosidad puntual y me como 200 anuncios y ya se me olvida la curiosidad inicial... O se me quitan las ganas de seguir buscando.
¿Aun no has llegado a la desgana de pisar tiendas físicas demasiado generalistas? Que yo las brocas de cobalto las pillo en el distribuidor de herramienta industrial, y no me como 7 vueltas para aparcar entre rancheras con pegatinas familiares, ni al Iberdrola, Movistar, tarjeta de crédito Leroy...
Leroy es para cuando te falta un serrucho el sábado a las 20.30.
Internet está siendo para trabajar o para cuando ya no queda alternativa de ocio alguna, o que no la tienes a mano.
Y muy buen artículo, por cierto.
#30 La verdad es que tengo el navegador muy "tuneado" con filtros de publicidad, filtros cosméticos y scripts para eliminar toda la basura. A la hora de buscar algo concreto, más o menos conozco cómo hacerlo sin que me aparezca morralla. La desgana me la causa el contenido que no puedo filtrar porque, como digo en el artículo, es contenido publicitario o propagandístico camuflado como real, espontáneo, y hay que filtrar "a mano".
El Meroy Lerdín me cae de paso, y me gusta visitarlo de vez en cuando para toquetear, ver los artículos "en 16K", a tamaño real, cosa que no se puede hacer por Internet. Si quiero algo muy concreto y que conozco, como tú dices, o me voy a la tienda de barrio o lo pido por Internet.
#56 A pesar de eso, diría que los buscadores dejan muchas cosas que desear. A l omejor para buscar una curiosidad concreta va muy bien. Sin embargo, a veces quiero buscar alguna noticia o artículo científico que haya leído anteriormente y a menos que recuerdes frases muy concretas que va a dar muchísima paja.
#4 La dictadura del SEO.
#43 Que tiene que ver con el SEO con el artículo o con el comentario de #4?
#54 Que literalmente define como tienes que estar en internet para venderte o vender algo. Al final el seob no es más que otra técnica de publicidad.
#55 Suponía que tienes un concepto erróneo sobre lo que es el seo, por eso te lo pregunté.
En pocas palabras el seo está relacionado con motores de búsqueda, no tiene nada que ver con las redes sociales que es de lo que va el artículo.
Te dejo un enlace para ampliar tu información sobre este tema por si te interesa https://developers.google.com/search/docs/fundamentals/seo-starter-guide?hl=es
#57 ah! un evangelista! !
no, no tengo una idea equivocada de lo que es el seo. Me veo obligado a usarlo en varios de mis sitios.
Ya sé que no lo vas a poder comprender, simplemente me parece pernicioso y un mundo bastante turbio en el que la venta (de un producto o del propio sitio) prima sobre el contendido, y le da forma.
Que si usas frases demasiado largas, que si el título de la page tiene que estar en las tres primeras líneas del texto, que si tienes que usar determinadas palabras clave... la mitad de los blogs que existen a día de hoy lo hacen como método de creacion de contendido "orgánico" para posicionar una tienda en buscadores... o webs que basan su modelo de negocio directamente es su posicionamiento en determinadas búsquedas para ganar algo de pasta con los anuncios....
A ver si es que no sabe de qué va realmente el seo no voy a ser yo.
#57 #62 Una cosa es el cómo empieza una tendencia y otra lo que termina abarcando. Efectivamente puedes tomar SEO como algo más literal, pero en general eso tiene que ver con muchísimas cosas, después de todo, lo que hagas en redes sociales, tus menciones, etc, también te genera visibilidad en buscadores.
#72 Por fin una respuesta coherente. Tienes razón pero… los bots que hay en la redes sociales generalmente no están por culpa del seo, están para manipular la opinión pública. Que también los hay para el seo, pero no tanto como para señalar al seo como único culpable de todo el asunto que se menciona en el artículo.
#4 La única solución a los problemas que has planteado vendrá el día que para acceder a Internet se haya de estar identificado de forma personal, con tu nombre, apellidos y DNI. Ahí dejará de haber perfiles falsos creados para hacer propaganda o venderte (o estafarte) cualquier servicio de mierda en la red. Cuando la gente, por pura vergüenza y no querer quedar como palurdos analfabetos, dejará de insultar a diestro y siniestro al resto de usuarios o de defender a Franco, el Holocausto, o cualquier otra barbaridad similar.
Pero claro, es una solución que si bien elimina el cáncer que se ha extendido por toda la red, viene con un precio muy alto a pagar, porque el ambiente de "libertad" y sobretodo anonimato (más o menos real) que ha existido en Internet desde casi sus inicios quedaría tocado para siempre.
Cada cual deberá juzgar personalmente si prefiere permanecer enfermo o aplicar una cura que puede ser peor que la enfermedad. En mi caso, creo que es algo que llegará sí o sí tarde o temprano de forma inevitable. El ambiente de bulos y cámaras de eco que se ha creado, que llega a radicalizar hasta extremos surrealistas a la gente (véase el caso de Qanon en EEUU como gran exponente) es insostenible a largo plazo para una sociedad sana y democrática. Y con la llegada reciente de los deepfakes, las imagenes generadas por IA, o ChatGPT, la cosa no va a mejorar. Al final, como se suele pasar a menudo, el problema es el propio ser humano y sus sesgos, que son la razón por la que como suele decirse "no podemos tener cosas bonitas".
#4 Algunas personas pasamos demasiado tiempo en Mensaje como para saber cómo están en los demás lugares.
Gracias por el artículo.
#4 Depende, depende. Hace poco me metí en un video de YouTube que animaba a la gente que sufriera una okupación que no recurriera a la policía, sino que usara la fuerza. Y expliqué en los comentarios la diferencia entre allanamiento y usurpación y por qué todo lo que contaba el del vídeo podría ser incluso perjudicial para el propietario. Y tuve respuestas del tipo "tienes razón".
#2 No son las personas. Es la maquinaria de persuasión, política o comercial, como bien apunta #0 en su brillante análisis. La barrera que existía entre contenido y publicidad (o propaganda, que viene a ser lo mismo) se ha desmoronado y hay hilar muy fino para conocer y discernir los intereses de las fuentes.
Las personas -la mayoría, al menos- ni queremos comprar ni tenemos nada que vender. Lo que no quita para que un reducido porcentaje de ellas utilice cualquier medio para vender su mercancía.
#2 No sé si comparto esa visión. Creo que Internet ha claudicado a un modelo de negocio basado en la publicidad intrusiva, el tráfico de datos, el secuestro de tu atención... pero no necesariamente tenía que haber sido así.
A veces pienso que me gustaría volver a 1995 y que se normalizase pagar 10 pesetas por leer un artículo y 1 céntimo por comentar.
#11 La web sería un asco. Los partidos y los lobies con presupuesto serían quien pagaría los comentarios y bastante basura nos meten ya.
#22 No estoy del todo seguro. Por poner un ejemplo, en los tiempos del SMS donde se pagaba por enviar un mensaje, no había más spam que hoy. Y el nivel de ruido era mucho más bajo que con la atrocidad de WhatsApp que optó por el modelo contrario (servicio gratis a cambio de explotar tus metadatos, etc).
#11 "y que se normalizase pagar 10 pesetas por leer un artículo y 1 céntimo por comentar. "
No, gracias. No.
Mayor mercantilismo que ese, no es posible imaginar. ¿Qué clase de solución es esa?
Y la publicidad seguiría entrando igual, de un modo u otro..
#28 No me refería a eliminar el contenido gratuito sino a que los sitios que son "gratis" a cambio del tráfico de datos personales y de clicks hubiesen optado por otro modelo de negocio: no traficar con datos y cobrar por el servicio.
#2 Las personas y la misma estructura de Internet.
Ahora mismo ¿Quién tiene un blog? ¿Cuántas páginas "pasivas" conoces que se limiten a dar información de cualquier tipo simplemente? Todo son redes sociales que están totalmente penetradas de intereses y que se retroalimentan. Y no son neutrales.
#2 el problema
sonsomos las personasEstá muy guapo el artículo, los zurullos del oso merecen un Nobel
La publicidad siempre encuentra la manera de adaptarse a los mecanismos de defensa de los usuarios, cuando estos desarrollan un cierto tipo de discriminación selectiva se las apañan para inventar nuevas formas de "hackearla". Hay un libro que leí que se llama "Comerciantes de atención", de Tim Wu, que no está mal.
Yo entré hace poco aquí (también "decidí" comentar en ciertos videos de Youtube que sigo), tras muchas dudas sobre si comentar en internet por todo lo que mentas, y creo que uno puede hacer un uso responsable y constructivo del diálogo. Es cierto que la mayoría de comentarios no aportan nada, que solo meten mierda o se dedican a decir algo para recibir palmaditas en la espalda. Creo que eso es parte del problema: la identificación visceral con nuestras opiniones y comentarios, cómo si no fuéramos capaces de dialogar por el mero hecho de dialogar, aprender algo nuevo y acabar con una comprensión mayor (o con la cabeza hecha un amasijo de dudas, paso previo a la comprensión). La verdad es que sí he hallado ese espacio, en la sección de artículos fundamentalmente, pero es una parte ínfima del pastel.
Dejando a un lado intereses espurios (publicidad, business, propaganda política), creo que deberíamos reflexionar al comentar y tratar de mantener siempre ese enfoque constructivo, comprendiendo que a nada bueno contribuyen las posiciones fanáticas, mucho menos sin argumentos. Quizás una satisfacción efímera al huir de la tensión que nos produce repensar nuestras ideas parezca buena idea a corto plazo, pero a largo plazo...
#1 Viendo la publicidad agresiva que se hace a día de hoy creo que simplemente no están sabiendo adaptarse a esos mecanismos de defensa. Porque los que los tenemos tan desarrollados a día de hoy no hay forma humana de llamar nuestra atención de forma positiva. Estamos tan saturados de publicidad que la sabemos ignorar perfectamente hasta que se vuelve literalmente molesta. Y no entiendo qué cabeza pensante puede pensar que molestar al usuario al punto de que rechace tu publicidad puede ser beneficioso para su negocio.
Hace unos días he empezado a ver otra forma de publicidad en páginas web de móvil en la que cuando bajas la pantalla y pones el dedo encima se convierte como en una pegatina deslizante que sube para arriba y deja a la vista el mismo anuncio de nuevo (algo así como el deslizar de Tinder). Lo que me obliga a mover la mano, buscar un punto limpio en la pantalla sin publicidad y seguir bajando. ¿Creen que este caso voy a comprar lo que me ofrezcan en ese anuncio? Porque solo estoy buscando la posibilidad de librarme de él, no me estoy interesando.
El tema de la publicidad me llega a parecer de un tiempo para acá que se ha convertido algo así como una estafa piramidal en la que estafan en una empresa a un pringao que quiere publicitar algo y luego tienes todo un entramado detrás que se dedican a contratarse entre ellos para facturarse servicios de publicidad y posicionamiento al que nadie hace caso.
"El que sólo menea noticias que pueden perjudicar a la iglesia católica; el que sólo menea noticias opuestas a la OTAN o a "occidente" (muchas veces, de fuentes oscuras o difíciles de encontrar salvo que se pertenezca a un RSS muy específico o se dedique en cuerpo y alma al análisis de esas noticias); el que menea cualquier noticia contraria a los postulados feministas o al Ministerio de Igualdad (y su contraparte del que sólo menea noticias relacionadas con sucesos plausibles de tener un origen machista); el que prácticamente menea el feed de Twitter de un político de cierto partido político (y su contraparte del que pŕacicamenre sólo menea artículos contra el político de cierto partido político). También están los que sólo menean sucesos en los que cuyo presunto culpable es de procedencia extranjera o de cierta etnia, o los que menean contenido de fuentes extremadamente similares, o los que menean contenido en vistas a regionalismos o nacionalismos..."
Quien lleve tiempo por aquí sabe que no son descripciones aleatorias .
#29 yo limitaría a un envío por persona a la semana.
#29 Lo ha calcado.
Ya podemos imaginar el "entrenamiento" de las IAs de próxima generación con este tipo de propaganda.
No va a quedar ni una equidistante!
Porque todo se ha mercantilizado. Todo el mundo pretende vender algo y todo se ha convertido en un medio para vender. Cualquier lugar, contexto o situación se utiliza como medio para la venta. Y el que no vende, está defendiendo su compra. Y cuando la "venta" no es simplemente una transacción comercial, los mismos principios aplican: vender un relato, un partido político, unos principios (y normalmente si no gustan, también se tienen otros) o cualquier otro item.
Y creo que la situación irá a peor con las IAs.
Gracias por el artículo. Me ha gustado.
Me has recordado mucho a antiguos maestros, como Wardog o el genial Fuckowski (un abrazo, Alfredo)
Que el esperitu del sysop sea contigo, op.
#40 una viruta perfecta
Bueno, ahora entiendo por qué las pocas noticias que he subido a lo largo de mis años en Meneame nunca llegaron a portada (y algunas lo merecían)
Pues a mí me he parecido un tostón de articulo: recargadísimo, y muy espeso para la temática que trata y todo porque el móvil del redactor no fue capaz de marcar como spam lo que debía.
#0 Glorioso. Y con mucha razón en todo.
Eso sí, las brocas de cobalto están sobrevaloradas.
#25 Las finas se parten y queman como otra cualquiera, pero las gordas, con aceite de corte, duran lo que no está escrito.
Me has hecho recordar los moderadores de Barrapunto. Que de vez en cuando, según la implicación en la web, te mandaban el mensaje "Te toca moderar. No puedes comentar esta noticia".
Lo de meta-moderar ya era modo DIOS
#6 Eso es cuando el master del juego también tiene personaje propio en la historia. Muy jodido ser neutral!
Sin entrar a opinar del fondo del artículo, sí quiero decir que hay niveles. Ver la televisión, por ejemplo, se me hace imposible. Simplemente se dedican a decirme qué debo pensar, cosa que no es su función y que no acepto.
Y otra cosa, aquí en menéame, siempre existe la posibilidad del ignore y hay personas que se quedan sin karma para comentar, todos imaginamos los motivos.
Fdo.: un facha equidistante y podemita apesebrado
#3 No ves la televisión por que te dicen qué debes pensar.... pero entras a menéame
#59 Menéame contra Televisión. ¡ Encuentra las diferencias !
#68 Muchas, pero me ha hecho gracia, en la televisión te dan discursitos, aquí votos y strikes.
#69 strikes no, hombre. Eso es una leyenda urbana. Seguro que no conoces a nadie que le hayan puesto un strike.
No hay frase que más me saque de mis casillas en los últimos tiempos y que se ha puesto muy de moda en mis circulos: "Te lo compro"
Yo no les llamaria fanaticos, esos perfiles estan por encima de eso, son "Zelotes".
Por otro lado la publicidad ha aprendido mucho mas de lo que parece a simple vista y en las redes sociales la practica esta muy marcada; Se dirigen campañas de propaganda, ya sea politica o comercial, que van directamente a la parte inconsciente del cerebro. Estan perfectamente estructuradas para que la parte logica del mismo no las procese.
Decian que la psicologia no servia para nada... Sirve para venderte mierdas que nunca has querido y que no quieres ni siquiera despues de comprarlas.
Si buscas paz en una tienda ya vas mal.
Notable análisis, me llamó más la atención los párrafos dedicados a Menéame y la masa de criticones gratuitos. Me hizo recordar a mi estimable Kiko Amat que decía que eso de enviar tweets era poco viril, es como de cursi cotilla. "Es el equivalente exacto de enviarse notitas en BUP... Sí, es un poco como en esos foros de rol... (el forista) es en la vida real un guiñapo sollozante... y una incapacidad para elogiar sin meter un put down, una especie de semi-insulto cínico".
La equidistancia cansa.
No, si el otro día decía en twitter que lo que me ofrecía era un 95 por ciento de aburrimiento con gente regañando sobre política y fútbol, en contrapartida alabando sus preferencias. Y moderno, lo que se dice moderno, no es. . Por no hablar de la competición por ser el más listo del universo que protagonizan muchos idiotas de campeonato. Y de récord...
Enhorabuena, excelente análisis (coincido al 100%) y descacharrantes metáforas
la moda ahora es todo lo "off grid"
#0 Gracias por las risas y por las cosas que he aprendido, magnifico artículo y muy esclarecedor.
"Si no compra una Dremel es que nunca ha probado una Dremel"
Verdad verdadera. La perfeccion hecha herramienta.
se pueden prohibir y cascarles strikes a todos los miembros.
Mu bueno.
Otros navegan por Internet sin ningún tipo de filtro de publicidad y sin que parezca importarles pues su cerebro parece que tapa todo banner y anuncio con una imagen en negro, con un biombo imaginario que tapa el cartelón virtual
Eso lo aprendí en los tiempos del ADSL, nunca he usado addblock.
Dicen que si tienes algún problema en un ojo el cerebro sería capaz en gran parte de los casos de corregir el problema por sí mismo.
También he desarrollado un instinto para esquivar elegantemente a los jodidos entregafolletos en los pasillos de los centros comerciales. Lo hago de forma que les siembro la duda sobre si acercarse o no, lo justo para que no lo hagan, por los loles.
#14 yo era como tú, hasta que lo probé (lo del bloqueador de anuncios), ¡que maravilla! Y además las webs cargan más rápido. Alguna rompe (muy pocas), y la mayor parte de las veces decido no consumir ese contenido.
Aprovecho para preguntarte por esto: "Con esa silicona le entra toda el agua; lo mejor es cemento Portland".
Vale el cemento Portland como sustituto de la silicona, es para el plato de ducha del baño, está la pared en piedra y en la parte baja donde entra el plato tengo silicona, pero no funciona nada bien. Es el cemento una opción? Gracias!
Me ha gustado el artículo por cierto, gracias
#19 yo no tengo mucha idea, pero yo tiraria de sikaflex. He visto lunas de coche pegadas con eso y manterse son que se cuele agua.
#19 Para tu caso la silicona debería funcionar bien, pero el problema es el aplique, que no agarra con el resto de superficies. Para eso están los cementos plásticos (o, como dice #33 compuestos tipo Sikaflex) que agarren bien y no sean porosos, nunca un cemento tipo Portland.
Supongo que cuando un periodista publica un articulo el, su equipo y sus amigos deben votarle positivo en meneame para ganar visibilidad y clicks. Al menos, es lo que yo haría.
#27 Como los inflitrados del independiente
Me ha gustado el artículo, muy acertado.
Yo lo que no entiendo es por qué dichos trolls y cuentas bots tienen la capacidad de publicar noticias y artículos y a mi, que tengo cuenta desde hace muchos anyos, me dice que no cumplo los requisitos. Igual tengo que tener un comportamiento más de bot/troll.
#0 Enhorabuena. Muy bueno.
Creo que confundes "internet" con "redes sociales"
#10 Ojalá, pero vamos cuesta abajo y sin frenos. Las webs independientes o se van perdiendo, o quedan invisibles debajo de una pila de webs de mierda escritos por bots o por becarios en el mejor de los casos, en los que tienes que hacer scroll para comerte 15 anuncios antes de llegar adonde empieza la información de verdad.
Ya casi no sé buscar en google si no añado la palabra "reddit" a continuación, y ni eso sirve de garantía de que lo que busque lo ha escrito una persona porque lo piensa realmente, o porque está vendiendo un producto con cuentas de astroturfing.
Echo de menos los tiempos de geocities.
#17 si las webs independientes van desapareciendo o quedan invisibles es porque los usuarios han preferido usar las redes sociales para "informarse"
Como quien prefiere fast-food a un buen cocido de legumbres.
Oferta demanda + Capitalismo
Y bueno para mi internet es algo más que la navegación web
#10 ojala solo eso. Las noticias tambien se estan complicando, y bueno, se comprende que no viviran del aire y piden subscripciones, donaciones y en fin, dinero.
Otra cosa es buscar una receta de cocina simple. Antes de llegar a ingredientes e instrucciones, hay que hacer scroll por toda la historia de la vida del autor de la receta y tambien de la vida de todos sus… antepasados hasta los neoliticos. Y cerrar 15 popups, sin contar del de las cookies
#66 o verte un video sin descripción ni medidas ni ingredientes