Tras casi dos semanas de polémico recuento, aún no se sabe si el vencedor definitivo es el nacionalista Nasry Asfura, con un 40,52% de los votos, o el liberal Salvador Nasralla con el 39,20%. Se ha admitido que hasta 2.749 actas presentan irregularidades, por lo que alrededor de medio millón de papeletas (el 15,5% de los sufragios) deberán ser recontadas, una a una. Pase lo que pase, las dudas sobre la legitimidad del proceso son enormes ante la “injerencia” de los Estados Unidos.