Llamamos «Cosas que pasan» a una clase de hechos un poco funestos que, después de que pasen, no tienen explicación. Pasan, y cuando quieres saber cómo, nadie logra decir qué sucedió de verdad. Quizás la sentencia del Supremo sea solo eso: cosas que pasan. «Cosas que pasan» es también cómo llamó Trump al descuartizamiento de un periodista en el consulado de Arabia Saudí en Estambul.
Podría haber una conexión secreta entre todas las cosas que pasan inexplicablemente.