Cuando era pequeño, aquí en Málaga había una empresa muy grande de confección de paños. Hacían las toallas de hospitales por ejemplo. Yo recuerdo tener toallas con taras de hospitales de Málaga que mis padres compraban ahí porque eran más baratas. Ninguno habíamos estado internados en un hotel para haber tenido la oportunidad de robarlas.
A nosotros nos vendían paños para limpiar maquinaria industrial y habían hasta sábanas con sangre de hospital.
Lavandería externalizada.