#107 Precisamente el mercado de las gafas y cristales se ha abaratado muchísimo en los últimos años. No es un mercado cautivo como los alquileres y hay muchísima competencia. Si algún grupo óptico sube precios, otros se beneficiarán.
#47 No veo demasiado problema en que un rico se gaste mil pavos en unas gafas y le devuelvan 100. Es un mal muy menor comparado, por ejemplo, con los chanchullos que puede haber al convocar concursos públicos para la dotación de gafas a través de la SS, tal y como propones.
Hay que hacer las cosas fáciles. Pedirle a una familia humilde que vaya a la óptica con una declaración de bienes y el IRPF debajo del brazo, es condenar a muchos chavales a no ver bien en la escuela.
Las ayudas han de ser universales. En cuanto se haga algún tipo de discriminación (aunque sea positiva), hay lío.
Lo que hay que hacer es aplicar una fiscalidad progresiva verdadera.
A todos las mismas ayudas, y ya se compensará aportando más quién más tenga y gane. Es mucho más fácil, menos burocrático, más directo y, en mi opinión, no va contra la justicia social.
"Si (...) se difunde el mensaje de que no hay denuncias falsas y está prohibido cuestionarlas, cada vez más hombres creerán que pueden acabar en la cárcel y arruinados porque sus omnipotentes parejas pueden hundirles la vida chasqueando los dedos."
¿Soy el único que no entiende este argumento?
Por otro lado, penalizar una generalización tan burda no significa negar que puedan existir denuncias falsas estadísticamente irrelevantes. Puestos así, cualquier generalización sería válida siempre que se cumpla aunque sea en una mínima parte de la población.
#3 O dicho con más precisión matemática: la esperanza media al jugar a la lotería es negativa (jugar a la lotería = gasto en lotería - premio recibido)