Cualquier noticia de éste tipo me toca los cojones, pero ésta lo hace de manera mayúscula: en el 2005 tuve una hernia de disco, para el dolor tomaba (literalmente) 13 pastillas, airtal, tramadol y otra que no recuerdo cada 2 horas combinandolas, 11 gotas de rivotril y un pinchazo de algo que me dejaba más que KO. Con este panorama llegué a la declaración de la renta y me la hizo un conocido, de toda solvencia en la materia, pero se equivocó, a pesar de que mi mujer le pasó toda la información.
Yo firmé la declaración aquella, y si me hubieran puesto mi sentencia de muerte también la hubiera firmado, porque estaba en la parra todo el día.
Cuando vino la carta de hacienda y la leí, me veía con los grilletes en prisión, el tono era como si hubiera cometido un genocidio, o así me lo pareció a mí.
El caso es que mi mujer llevó a hacienda informes médicos, para poner una reclamación aduciendo que yo no sabía lo que firmaba, ya que era cierto, y allí le dijeron: primero paga y luego reclama.
Pagué, reclamé y la contestación fue que si he firmado, eso va a misa.
Y ahora ésta resulta que no sabía lo que firmaba.
HIJOS DE LA GRANDÍSIMA PUTA.
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#130 la realidad fue otra bastante diferente.. no fué a ese al que se le recibió al grito de "vivan las caenas!!"??