Unas filtraciones de la lluvia en el edificio han puesto al descubierto el cadáver. El edificio, situado en la calle Luis Fenollet, en el barrio de la Fuensanta, ha sufrido un atasco en el desagüe, lo que ha inundado la terraza del último piso, en la vivienda en la que se han hallado los restos y, de ahí, ha caído a viviendas inferiores. El líquido filtrado era de color negro y con mal olor, lo que ha alarmado a los vecinos. El presunto fallecido tenía dos hijos con los que no tenía ninguna relación y no tenía más familia conocida.