Los viajes serán gestionados por una empresa privada. La primera nave partiría en 2020 con seis turistas, que tendrían que pagar unos 250.000 dólares.
La agencia espacial rusa, Roscosmos, ha aprobado la construcción de una nave específicamente para enviar a turistas al espacio exterior, anunció hoy KosmoKurs, la compañía que gestionará esos viajes suborbitales.