"Volvió a cometer el mismo error: construir toda su estrategia contra alguien, no a favor de algo". "Llevan dos años pidiendo la caída de un Gobierno que no cae. Y eso solo genera frustración". Cada nueva convocatoria en la calle, asegura, refuerza la imagen de un PP impotente. "En comunicación política, insistir en un enemigo que resiste no desgasta al adversario: desgasta al que grita. Cada nueva manifestación confirma la idea de un PP impotente, atrapado en un bucle emocional que ya no moviliza". Pedro Sánchez ha logrado justo lo contrario.