Dos años después de comenzar su relación, Raquel se quedó embarazada por primera vez. «Tenía 17 años y Pablo 19, casi 20. Erámos muy jóvenes, así que planificado no fue. Fue complicado contárselo a nuestros padres, pero tampoco se nos pasó por la cabeza interrumpirlo», explica. Meses más tarde, llegó Paula. «Fran y Paula, la segunda, se llevan 15 meses», añade.