Las autoridades sajonas sospechan que el incendio en un complejo previsto para el alojamiento de refugiados en Bautzen fue provocado. Esto dijo el director del Centro Operativo de Defensa Contra el Extremismo, OAZ por sus siglas en alemán, Bernd Merbitz. Sin embargo, las pesquisas realizadas hasta ahora no ofrecen certeza de esa sospecha. Se investigará en "cualquier dirección", dijo Merbitz.

El incendio en el antiguo Hotel estalló en la madrugada del domingo. Algunos espectadores lo siguieron. Algunos de ellos estaban ebrios, dijo la policía, y hacían "comentarios despectivos" o mostraban una "alegría no disimulada". Según la policía ha comunicado, quemaron todo el techo de la conocida Husarenhof Bautzen desde el exterior del centro. El edificio, que fue utilizado con anterioridad como un hotel y debía estar preparado para un máximo de 300 refugiados, aún no estaba habitado.

Los trabajos de extinción de 70 bomberos fueron obstaculizados por parte de los espectadores. Se solicitó tres veces a los ciudadanos que se dispersasen. Dos jóvenes de 20 y 19 años de edad fueron detenidos debido a que no cumplieron con la solicitud de desalojar la zona. La policía informó que algunos de los residentes y curiosos que se encontraban en las inmediaciones del edificio estaban en estado de embriaguez. "Algunos en el escenario de incendio hicieron comentarios sarcásticos y placer no disimulado", se dice en el comunicado de la policía.

Una vez más Sajonia se ha convertido en un lugar de violencia xenófoba: ya la noche del jueves manifestantes estridentes en Clausnitz rodearon un autobús de refugiados, pronunciando consignas como "nosotros somos el pueblo". El video del bloqueo del autobus por parte de 100 manifestantes xenófobos ya no está localizable en el sitio web donde se expuso en un principio. Tras el incidente, la acción de la policía fue criticada. Una segunda secuencia de video mostró cómo policías arrastraron a los refugiados fuera del autobús. El ministro del Interior de Sajonia, Markus Ulbig (CDU), posteriormente anunció a la agencia de prensa local Chemnitz que el Ministerio del Interior de Sajonia evaluará el uso de la fuerza de la policía de inmediato.

Los incidentes en Clausnitz y Bautzen son alarmantes e impactantes al mismo tiempo, según dijo el primer ministro Tillich. "No son humanos quienes hacen algo así. Son criminales." Las autoridades policiales y locales investigarán en consecuencia toda responsabilidad penal y pedirán rendición de cuentas de los responsables. Semejantes actos sucios "indignan a las personas que pusieron en valor la revolución pacífica y el empeño en la reconstrucción de Sajonia".

Tambien el ministro del Interior de Sajonia, Ulbig, condenó duramente los incidentes en Bautzen. "Lo que particularmente me preocupa, es el hecho de que varios ciudadanos de Bautzen ebrios jaleen estos actos", dijo Ulbig. "Es insoportable, cómo se utiliza abiertamente el odio y la falta de respeto hacia los extranjeros", agregó. "Estamos frente a una tarea social común importante para conseguir sacar este odio de las mentes de la gente."