En 1925, Errico Malatesta escribía para Pensiero e Volontà sobre la actitud de los anarquistas hacia el sindicalismo. Un par de meses más tarde Emilio López Arango respondía a las opiniones de, en sus palabras, el "viejo maestro" en el Suplemento La Protesta de Buenos Aires. Reproducimos aquí ambos textos igualmente titulados: primero, Malatesta; luego, López Arango.