De nuevo nos ocupamos de Motorland, y de las falsedades y los intentos de construir una rueda cuadrada. En esta ocasión, prescindamos de las cuestiones de opinión, por si acaso la subjetividad, y con la calculadora a cuestas, centrémonos, exclusivamente, en cuestiones económicas, incluyendo a quienes quieren meter, en un vaso, el contenido de la Estanca alcañizana.