Durante la final de Eurovisión 2025, celebrada en Basilea, Suiza, la televisión pública flamenca VRT tomó una decisión sin precedentes: interrumpió la emisión de la actuación de Israel para emitir un mensaje de condena explícita a las acciones del Estado israelí en el contexto del conflicto en Gaza. El mensaje se cerraba con los hashtags
#CeaseFireNow y
#StopGenocideNow.