#179 Lo único que he asumido en mi comentario, de manera correcta, es que eres un hombre hetero. Y lo he asumido porque este comentario aparece siempre que una mujer enseña las tetas para reivindicar algo.
Y aparece porque, por desgracia, la experiencia del hombre hetero sigue siendo el estándar por defecto en muchísimos ámbitos, este incluido. Ignorar, queriendo o sin querer, la existencia y la experiencia de aproximadamente el 50% de la población (las mujeres hetero y los hombres gays) es molesto para los que formamos parte de ese 50% y por eso algunos respondemos, para combatir los sesgos que tú mismo reconoces. A mí no me gusta ser condescendiente, pero puedo serlo como respuesta a un argumento condescendiente, como era el tuyo, fuese o no tu intención. Esto es lo único que te critico en mi comentario, y tal y como te lo critico, también te agradezco que reconozcas tu sesgo.
No entiendo muy bien la mención al instinto sexual. Yo soy una mujer hetero, tengo instintos sexuales, estoy en edad reproductiva, y cuando veo a un hombre atractivo, puedo pensar "caray, si él quisiera y yo me dejase" pero nada más. Somos animales, sí, pero hemos evolucionado lo suficiente como para controlar los impulsos básicos, porque nos preocupa el bienestar físico y mental de los demás. La erotización del pecho femenino es una fenómeno cultural que no verás en todo el mundo; en no pocas culturas las mamas son sencillamente herramientas para criar a la prole y están exentas de toda carga sexual.
En occidente, sin embargo, tanto los pechos en particular como el cuerpo femenino en general, han sido sexualmente objetificados desde hace siglos y siglos. Históricamente, la mirada masculina ha convertido el cuerpo femenino en un objeto meramente erótico, negando casi la humanidad de la mujer. Creo que es precisamente por eso que a mucha gente le ofende tanto que una mujer decida de manera consciente y voluntaria utilizar su propio cuerpo como sujeto político (como es el caso de Amaral). Porque haciendo esto está rechazando el statu quo que básicamente espera de ti que, como mujer, seas mona y te estés calladita y en tu sitio. Y eso a mucha gente no le gusta nada.
Pero estoy segura de que todo esto ya lo sabes, y te lo digo con sinceridad.
Por último, lo de la imagen que yo me haya podido formar de ti es todo cosa tuya, me temo. Yo sólo he aludido a tus razones, en ningún momento a tu persona. No te conozco, ni tú a mí. Lo único que nos queda en confiar en la buena fe del otro.
#108 sí, lo soy. Y sí, me lo he planteado. Y ver a una madre amamantar a un bebé me produce exactamente la misma ternura que te pueda producir a ti. Y sí, tengo ese sesgo que mencionas y que ya he respondido en otro comentario. No es agradable, pero lo tengo.
Mi punto es que la evolución nos ha dado a nosotros ese reflejo instintivo de alterarnos por la visión del pecho femenino, por mero hecho reproductivo. Al igual que el tener una erección cuando algo nos excita. Funciona de una manera muy rápida, en condiciones normales. No es un razonamiento.
Ahora bien, ¿existe también el instinto sexual producto de nuestra manera de socializar y entender el sexo? Pues sí. ¿Activa los mismos mecanismos a nivel interno? Lo desconozco, porque no tengo conocimientos de biología como para asegurarlo. Entiendo que sí, pero no lo se. Si una persona homosexual se excita al ver a alguien atractivo de su mismo sexo, es evidente que no existe finalidad reproductiva ninguna, y que la respuesta es la misma que en el caso heterosexual. De ahí deduzco que los mecanismos internos funcionan de manera parecida.
¿Alguno de esos dos hechos legitima una agresión, un insulto o un intento de censurar a alguien por mostrar partes de su cuerpo? Evidentemente, no.
Ése es el argumento algo más elaborado. No es necesaria la condescendencia ni las asunciones de cosas que se desconocen.
Yo me puedo atrever a suponer que te has montado mi imagen como un señor gordo, palillero, en la barra de bar, mirando jovencitas, despotricando contra extranjeros y mirando el reloj para ver si ya es hora de ir a misa, a los toros o al puticlub. Pero es tan sencillo como que se pueden tener sesgos, es sano contrastarlos, y no tener una opinión 100% alineada con la nuestra no convierte a la otra persona en una caricatura como la descrita.