Tres jóvenes fueron atracados durante una noche de agosto de 2009 en el parque de la Devesa de Girona. A punta de cutter el atracador se hizo con un botín de 135 euros y tres teléfonos móviles pero se sintió culpable y ofreció a los jóvenes recuperar el botín si le ganaban a piedra-papel-tijera. Perdieron.
#6:
#4 creo que el extraño y nunca antes oído mecanismo fue el de "miedo al cutter" (también conocido como "aprensión al corte") unido al sentido de autoconservación
Las historias de ladrones y policías a veces sorprenden. Lo que pasó una noche de agosto en la Devesa de Girona parece increíble pero es real. Tres jóvenes fueron atracados por un hombre que los amenazó con un cúter. Una vez tenido el botín, 135 € y tres móviles, el ladrón les ofreció la posibilidad de recuperar el teléfono y los móviles si le ganaban a piedra-papel-tijera. Jugaron y el atracador ganó, y tal como era el trato, se llevó el botín. Ahora el fiscal pide para el atracador 4 años y medio de prisión.
La historia sucedió en la madrugada del 15 de agosto pasado y el escenario fue la Devesa de Girona, por los alrededores de las carpas de música que hay en verano. Tres jóvenes – Xavier, de Caldes de Malavella, y sus dos amigos, David y Sergi – iban caminando entre los árboles cuando se les acercó un chico con aspecto magrebí que les dijo: ¿Sois de Girona, no? Donde está la estación de tren de Girona, haciendo servir un catalán muy correcto. Cuando Xavier se giró para señalarle donde está la estación, el joven agarró a Sergi por el cuello y le puso un cúter en las costillas. El individuo cambió de idioma y comenzó a hablar en castellano, también de forma muy correcta. Los tres sois amigos, ¿No?, les dijo. Ya sabéis lo que os toca: venid conmigo. Sin dejar nunca a Sergi, les conmino a ir hacia un banco que estaba a unos siete metros de donde se habían encontrado. Una vez allí, les ordenó que se sentaran y que bajasen la cabeza y no le mirasen. Los tres obedecieron. El ladrón les ordenó que vaciasen los bolsillos y fuesen dejando lo que llevasen encima del banco. Los tres jóvenes dejaron las carteras y los móviles, y el ladrón cogió las carteras y fue sacando el dinero que había dentro, pero nada más. También cogió los móviles y se los puso en el bolsillo. Mientras seleccionaba el botín no paraba de apuntarles con el cúter. Una vez con el botín, les espetó: No es nada persona, es para droga. Si pudiera, ahora os lo devolvería todo y robaría a otro. Dicho esto, desmontó el cúter, lazó el mango de plástico y dejó la hoja sobre el banco. Acto seguido, se dirigió a uno de los chicos – David – y le dijo: Jugamos a piedra, papel o tijera y si ganas os lo devuelvo todo. David, deseando quitarse de delante al ladrón de una vez, aceptó la apuesta y se jugó el botín (55 € suyos y 40 de cada uno de sus amigos, además de los móviles). Pero el ladró ganó y, como habían pactado, se llevó el dinero. Pero antes les dijo: Ahora quiero que os levantéis y os vayáis. No miréis hacia atrás. Si llamáis a la policía y me denunciáis, os vendré a buscar. Pero, claro, los jóvenes le denunciaron y dieron una descripción que sirvió a la policía para identificarlo. Hicham Chami, de 23 años. El fiscal le imputa un delito de robo con intimidación con uso de instrumento peligroso y pide una pena de 4 años y medio de prisión.
Las historias de ladrones y policías a veces sorprenden. Lo que pasó una noche de agosto en la Devesa de Girona parece increíble pero es real. Tres jóvenes fueron atracados por un hombre que los amenazó con un cúter. Una vez tenido el botín, 135 € y tres móviles, el ladrón les ofreció la posibilidad de recuperar el teléfono y los móviles si le ganaban a piedra-papel-tijera. Jugaron y el atracador ganó, y tal como era el trato, se llevó el botín. Ahora el fiscal pide para el atracador 4 años y medio de prisión.
La historia sucedió en la madrugada del 15 de agosto pasado y el escenario fue la Devesa de Girona, por los alrededores de las carpas de música que hay en verano. Tres jóvenes – Xavier, de Caldes de Malavella, y sus dos amigos, David y Sergi – iban caminando entre los árboles cuando se les acercó un chico con aspecto magrebí que les dijo: ¿Sois de Girona, no? Donde está la estación de tren de Girona, haciendo servir un catalán muy correcto. Cuando Xavier se giró para señalarle donde está la estación, el joven agarró a Sergi por el cuello y le puso un cúter en las costillas. El individuo cambió de idioma y comenzó a hablar en castellano, también de forma muy correcta. Los tres sois amigos, ¿No?, les dijo. Ya sabéis lo que os toca: venid conmigo. Sin dejar nunca a Sergi, les conmino a ir hacia un banco que estaba a unos siete metros de donde se habían encontrado. Una vez allí, les ordenó que se sentaran y que bajasen la cabeza y no le mirasen. Los tres obedecieron. El ladrón les ordenó que vaciasen los bolsillos y fuesen dejando lo que llevasen encima del banco. Los tres jóvenes dejaron las carteras y los móviles, y el ladrón cogió las carteras y fue sacando el dinero que había dentro, pero nada más. También cogió los móviles y se los puso en el bolsillo. Mientras seleccionaba el botín no paraba de apuntarles con el cúter. Una vez con el botín, les espetó: No es nada persona, es para droga. Si pudiera, ahora os lo devolvería todo y robaría a otro. Dicho esto, desmontó el cúter, lazó el mango de plástico y dejó la hoja sobre el banco. Acto seguido, se dirigió a uno de los chicos – David – y le dijo: Jugamos a piedra, papel o tijera y si ganas os lo devuelvo todo. David, deseando quitarse de delante al ladrón de una vez, aceptó la apuesta y se jugó el botín (55 € suyos y 40 de cada uno de sus amigos, además de los móviles). Pero el ladró ganó y, como habían pactado, se llevó el dinero. Pero antes les dijo: Ahora quiero que os levantéis y os vayáis. No miréis hacia atrás. Si llamáis a la policía y me denunciáis, os vendré a buscar. Pero, claro, los jóvenes le denunciaron y dieron una descripción que sirvió a la policía para identificarlo. Hicham Chami, de 23 años. El fiscal le imputa un delito de robo con intimidación con uso de instrumento peligroso y pide una pena de 4 años y medio de prisión.
#14 O sea que el tio desmontó el cuter y lo soltó en el banco para jugar a piedra papel tijera. Los tios son tontos. Coño eran tres y el estaba desarmado. Vamos que haría lo mismo que #10 PIEDRA!!!! y le arremando un sopapo que lo dejo mirando pa Cuenca.
#4 creo que el extraño y nunca antes oído mecanismo fue el de "miedo al cutter" (también conocido como "aprensión al corte") unido al sentido de autoconservación
#4 Además macho lo tuyo no va a ser el ajedrez mi la estrategia... tengo un 50% de posibilidades de conservar mis cosas sin pelear frente a un 100% de tener que romperme la cara con un tipo armado para que me las devuelva o otro 100% de dejarlo ir y perderlas.... joder pues claro que juego lo peor que puede pasar es que me quede como estaba.... el extraño mecanismo mental será el tuyo...
Hace años grabé con una navaja mis datos en el reverso del rejoj, en la chapa, y me robaron el reloj en la zona de La Romareda. Los ví pararse y volver a devolvérmelo. Me quedé tan a cuadros como éstos seguro.
Quizá sólo quería vacilar de lo bueno que es al pierda-papel-tijera. Yo he llegado a ganar unas 20 veces seguidas, sólo hay que pensar en qué es lo que el otro piensa que vamos a sacar
Comentarios
Traducción:
Las historias de ladrones y policías a veces sorprenden. Lo que pasó una noche de agosto en la Devesa de Girona parece increíble pero es real. Tres jóvenes fueron atracados por un hombre que los amenazó con un cúter. Una vez tenido el botín, 135 € y tres móviles, el ladrón les ofreció la posibilidad de recuperar el teléfono y los móviles si le ganaban a piedra-papel-tijera. Jugaron y el atracador ganó, y tal como era el trato, se llevó el botín. Ahora el fiscal pide para el atracador 4 años y medio de prisión.
La historia sucedió en la madrugada del 15 de agosto pasado y el escenario fue la Devesa de Girona, por los alrededores de las carpas de música que hay en verano. Tres jóvenes – Xavier, de Caldes de Malavella, y sus dos amigos, David y Sergi – iban caminando entre los árboles cuando se les acercó un chico con aspecto magrebí que les dijo: ¿Sois de Girona, no? Donde está la estación de tren de Girona, haciendo servir un catalán muy correcto. Cuando Xavier se giró para señalarle donde está la estación, el joven agarró a Sergi por el cuello y le puso un cúter en las costillas. El individuo cambió de idioma y comenzó a hablar en castellano, también de forma muy correcta. Los tres sois amigos, ¿No?, les dijo. Ya sabéis lo que os toca: venid conmigo. Sin dejar nunca a Sergi, les conmino a ir hacia un banco que estaba a unos siete metros de donde se habían encontrado. Una vez allí, les ordenó que se sentaran y que bajasen la cabeza y no le mirasen. Los tres obedecieron. El ladrón les ordenó que vaciasen los bolsillos y fuesen dejando lo que llevasen encima del banco. Los tres jóvenes dejaron las carteras y los móviles, y el ladrón cogió las carteras y fue sacando el dinero que había dentro, pero nada más. También cogió los móviles y se los puso en el bolsillo. Mientras seleccionaba el botín no paraba de apuntarles con el cúter. Una vez con el botín, les espetó: No es nada persona, es para droga. Si pudiera, ahora os lo devolvería todo y robaría a otro. Dicho esto, desmontó el cúter, lazó el mango de plástico y dejó la hoja sobre el banco. Acto seguido, se dirigió a uno de los chicos – David – y le dijo: Jugamos a piedra, papel o tijera y si ganas os lo devuelvo todo. David, deseando quitarse de delante al ladrón de una vez, aceptó la apuesta y se jugó el botín (55 € suyos y 40 de cada uno de sus amigos, además de los móviles). Pero el ladró ganó y, como habían pactado, se llevó el dinero. Pero antes les dijo: Ahora quiero que os levantéis y os vayáis. No miréis hacia atrás. Si llamáis a la policía y me denunciáis, os vendré a buscar. Pero, claro, los jóvenes le denunciaron y dieron una descripción que sirvió a la policía para identificarlo. Hicham Chami, de 23 años. El fiscal le imputa un delito de robo con intimidación con uso de instrumento peligroso y pide una pena de 4 años y medio de prisión.
#14 O sea que el tio desmontó el cuter y lo soltó en el banco para jugar a piedra papel tijera. Los tios son tontos. Coño eran tres y el estaba desarmado. Vamos que haría lo mismo que #10 PIEDRA!!!! y le arremando un sopapo que lo dejo mirando pa Cuenca.
Si fuera a piedra-papel-tijera-lagarto-spock mejor
¿Qué extraño mecanismo del pensamiento les llevó a las víctimas a aceptar jugar?
Yo me tiro encima del tío.
#4 creo que el extraño y nunca antes oído mecanismo fue el de "miedo al cutter" (también conocido como "aprensión al corte") unido al sentido de autoconservación
#4 Además macho lo tuyo no va a ser el ajedrez mi la estrategia... tengo un 50% de posibilidades de conservar mis cosas sin pelear frente a un 100% de tener que romperme la cara con un tipo armado para que me las devuelva o otro 100% de dejarlo ir y perderlas.... joder pues claro que juego lo peor que puede pasar es que me quede como estaba.... el extraño mecanismo mental será el tuyo...
hombre, si el tío llevaba un cutter en la mano yo papel no sacaría...
Para que luego digan que los catalanes somos agarrados.
Hace años grabé con una navaja mis datos en el reverso del rejoj, en la chapa, y me robaron el reloj en la zona de La Romareda. Los ví pararse y volver a devolvérmelo. Me quedé tan a cuadros como éstos seguro.
De lo que son capaces algunos con tal de conseguir echar una partidida...
WTF???
Piedra! Y le sueltas una hostia en toda la cara!!
P.D: Vale llevaba un cúter, pero es por hacer la gracia...
¡El ladrón ludópata!
Yo le pediría el doble o nada!!!
Quizá sólo quería vacilar de lo bueno que es al pierda-papel-tijera. Yo he llegado a ganar unas 20 veces seguidas, sólo hay que pensar en qué es lo que el otro piensa que vamos a sacar
Esto es una noticia de humor, no?
Ese es el famoso metodo del no tienes huevos: "A que no tienes huevos de devolverme la pasta si te gano al piedra-papel-tijera!!!"
Al menos te da la opción de recuperar lo perdido...