Inspección, inspección y más inspección.
Pongámonos en la situación de un director de hotel que quiere hacer las cosas bien y acabar con esta situación, pues conozco a unos cuantos y cuento con los dedos de una mano a los que no les importa este modelo de empleo.
La triste realidad es que en una industria tan competitiva, con márgenes operativos tan ajustados y una alta competencia en precios, es imposible competir contra el que hace trampas sin hacerlas tú. Si no se sanciona (duramente) al hotel que abusa así de sus trabajadores, seguirán pudiendo bajar los precios y mantener beneficios, viéndose perjudicados los hoteles que traten a sus empleados de forma digna.
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#5 Como nota y aunque llego tarde: haceos todos un favor y ved la película en VO. Si alguien sigue la F1 y está acostumbrado a escuchar a Lauda, flipará con la actuación de Daniel Brühl. La forma en que copia perfectamente el acento y la cadencia al hablar es increíble.