A medida que la tecnología va avanzando aparecen nuevos estándares en cuanto a cables y conectividad inalámbrica. Hemos visto así como hemos ido progresando hasta donde nos encontramos ahora. Ese USB 2.0 que hace años era lo más rápido que había ahora ha sido reemplazado por un USB4 que aún es de nicho y un mucho más común USB-C que está implementándose en cada vez más dispositivos. De hecho, en 2022 la Unión Europea avisó que el USB-C iba a ser obligatorio para móviles y tablets, algo que se puso en vigor en 2024.