La realidad virtual está a punto de llegar a nuestras vidas. Por fin. Proyectos como Oculus Rift, ahora impulsada por el motor económico de Facebook; Gear VR, de Samsung, que utiliza tecnología de Oculus VR (no os perdáis nuestra toma de contacto con vídeo); o Project Morpheus, de Sony, serán una realidad comercial más pronto que tarde. Sin embargo, nuestro interés en la realidad virtual viene de lejos. Nintendo coqueteó con ella hace casi veinte años, en 1995, con Virtual Boy, aunque no salió bien parada.
Comentarios
Que me avisen cuando inventen el "Orgasmatrón" de Woody Allen
#1 pues en estos momentos hay más interés entre la industria del porno en darle uso a los cascos de realidad virtual que entre las grandes estudios de videojuegos. A excepción del Morpheus de Sony, que tampoco viene haciendo mucho ruido, todas las demás compañías están viéndolas pasar.
Y la clave debe de ser más por la escasa demanda que por los problemas técnicos, ya que con un smartphone en un par de años se podrá hacer maravillas que aún ni imaginamos (resoluciones 4K, pantallas curvas, procesadores con aceleración gráfica a nivel de sobremesas actuales gamers) ahí si que podemos encontrarnos todos con la puerta de la RV en nuestro bolsillo.
Por que actualmente si quieres una experiencia decente debes de invertir un dineral en un equipo que queda obsoleto en un año, adquirir un prototipo del Rift y pelearte con drivers y mil historias que aún están muy verdes. Y eso no es un mercado apetecible para los creadores de contenidos ya que queda todo muy limitado a un grupo de entusiastas.
No sé por qué me da a mi la impresión de que esto no va a tener mucha demanda.
La realidad virtual paso de moda después de la película "El Cortador de Cesped", pero hay inversores que aun no se han enterado...