Los físicos de la Universidad Radboud, en Países Bajos, trabajan en un material inteligente que aprende cambiando físicamente a sí mismo, similar a cómo funciona el cerebro humano, podría ser la base de una generación completamente nueva de computadoras.
Sólo falta que esta IA coja consciencia de sí misma para detectar problemas en la humanidad y erradicarla. Me recuerda al personaje fictício de Ultrón. Y aunque esto pueda parecer fantasía no veo buen augurio en ese camino, toda computación descontrolada es peligrosa y aún más si hay cámaras y micrófonos por medio y conectividad constante a una red amplia como lo es Internet.
Comentarios
Molaría más positrónico.
Sólo falta que esta IA coja consciencia de sí misma para detectar problemas en la humanidad y erradicarla. Me recuerda al personaje fictício de Ultrón. Y aunque esto pueda parecer fantasía no veo buen augurio en ese camino, toda computación descontrolada es peligrosa y aún más si hay cámaras y micrófonos por medio y conectividad constante a una red amplia como lo es Internet.