Desde este miércoles y sin que los pasajeros -150.000 al año- se den cuenta, los vehículos aprovechan la parada final para recargar sus baterías. Literalmente, tres brazos (denominados patines) ubicados en los bajos descienden hasta tres placas ubicadas en el asfalto que, por contacto, alimentan al autobús. Una carga rápida, silenciosa e invisible para el usuario que tiene una duración de entre dos y cinco minutos -según la necesidad de recarga- y ofrece total autonomía al medio de transporte público sin retrasar ni un minuto los tiempos de su
Comentarios
Pronto el primer idiota electrocutao por intentar cargar gratis el móvil con tres cables
Eso existe ya en algunas líneas de autobuses de Madrid.
#1 No es el mismo sistema, creo. El que tú comentas es por inducción, ¿no?
#2 Efectivamente pero la finalidad es la misma, aprovechar las paradas de final de recorrido para cargar las baterías.
#3 La finalidad si, pero por contacto es mucho más efectivo.
Y no, no se cuanto porque nadie da los datos completos.
Pues espero que sea por inducción, porque si no, el primero que de un tropezón al bajar y se caiga a lo largo de las placas, le va a quedar una permanente de cuidado...
No entiendo estas mierdas. Deberían estar sustituyendo todos los autobuses urbanos por eléctricos que recargan durante la noche, y se distraen con experimentos.
#6 En mi linea de autobús seria 45 veces más batería. 15 horas, 3 fin de linea por hora.
Una batería (teóricamente) 45 veces más pequeña no es ninguna mierda, es muchisimo.