Steven Roberts, un apasionado de la electrónica, decidió abandonar la vida de urbanita en los 80 para convertirse en un "tecnómada". Vendió su casa y diseñó una bicicleta equipada con uno de los primeros portátiles para poder trabajar en cualquier parte. Su extravagante idea causó sensación en los medios y recorrió 27.000 kilómetros con futuristas vehículos: escribía en código binario con el manillar, movía el cursor con el casco y disponía de conexión a internet.
Comentarios
Da envidia lo bien que vive Aunque claro, si se me hubiera ocurrido a mí una idea tan brillante también viviría de lujo. Es lo que tiene no ser un loco visionario
En españa hace 10 años un grupo de personas hizo lo mismo, hizo como una especie de "La barraca" tecnológica y activista llamada Caravana Hacktivista.
Y recorrieron media España y llegaron a la CCC de Alemania.
http://www.guardarcomofilms.net/copiratas/
http://robinsonesurbanos.org/node/242
Yo los conocí en su ruta por Salamanca.