Una de las partes más descuidadas de las experiencias de usuario actuales es la gestión de los errores. Estamos tan ocupados diseñando los caminos felices a través de nuestros productos que a menudo nos olvidamos de prestar el mismo cuidado y atención a los momentos en que las cosas van mal. Nuestros productos digitales están plagados de callejones sin salida, códigos de error sin sentido, descifrables sólo para los desarrolladores, y caprichos exasperantes que dejan a nuestros usuarios frustrados y atascados. (vía microsiervos)
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etiquetas: mensajes de error , guía
Era mi primer ordenador y me había costado varios días ponerlo en parcha porque no reconocía el disco duro SATA, que si se veía en bios, durante la instalación del XP (necesitaba un controlador SCSI que había que meter con un diskete y no venía con la placa base)
Todo el puto día estuvimos para poder desactivar el maldito virus que provocaba que saltase ese error de sistema y se reiniciase antes que pudiéramos hacer nada para resolverlo, en un Windows NT.
En nuestro caso el servidor no llegaba a dar acceso alguno al entorno de usuario, no podíamos cambiar el reloj ni nada parecido.
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Capturar excepciones, identificar el origen de cada una, que pereza.
Donde se ponga el "Se ha producido un error, inténtelo más tarde" que se quite todo