Change.org, pese a no terminar de ser un método con verdadero valor, se ha convertido en uno de los portales estrella a la hora de canalizar las peticiones de los ciudadanos respecto a múltiples temas. La mecánica ya la conoces, creas una petición y empiezas compartirla en redes sociales para recoger firmas y darle más fuerza. Aunque por lo general la gente suele utilizar bien esta plataforma, desde hace tiempo vienen registrándose otros usos que nada tienen que ver con su filosofía.
Comentarios
Por fin le han encontrado utilidad.
#2 Tú eres una lacra social y en tu ADN reza el delito. Darás con tus huesos en una celda y ese día bailaré llorando de risa.
#3 Tu odio mi alimento.
#4 Circule, por favor, no llevo suelto.
#4 Tendrias que haber dicho, que te "quiten lo bailao", que mientras el espera para poder bailar, tu llevas bailando mucho tiempo.
Nunca hubiera imaginado que se le pudiera encontrar una función útil a una plataforma de clicktivismo como Change. El ingenio humano no tiene límites.
A ver si hay suerte y así la cierran de una putísima vez.