Un reciente estudio revela la primera evidencia directa de la producción de bronce arsenical en la isla Elefantina, Asuán, que data del Imperio Medio de Egipto (c. 2000-1650 a. C.). La investigación revela una tradición metalúrgica en el antiguo Egipto mucho más compleja de lo que se creía hasta ahora. La evidencia sugiere que los metalúrgicos del Imperio Medio aplicaban métodos controlados e intencionales para elevar el contenido de arsénico, mejorando significativamente la resistencia y durabilidad de sus aleaciones de bronce.