Microsoft ha confirmado que vendió servicios de inteligencia artificial y computación en la nube al ejército israelí durante la guerra en Gaza, aunque niega que su tecnología se utilizara para dañar a las personas. Aunque afirmó que su tecnología no se utilizó para causar daños durante la guerra de Gaza, Microsoft señaló que "no tiene visibilidad de cómo los clientes usan nuestro software en sus propios servidores u otros dispositivos".