Hace 3 años | Por Fryant a abc.es
Publicado hace 3 años por Fryant a abc.es

A las once de la mañana de un luminoso tercer día de junio de 1904 unos trabajadores de una antigua almadraba que existía en la playa de Santa María de Cádiz dieron con un increíble hallazgo. Estaban abriendo una zanja para enterrar las cabezas y desperdicios de los atunes y habían ahondado poco más de medio metro cuando uno de ellos -los gaditanos cuentan que se llamaba «Malos Pelos»- dio con su pala con varias monedas, los famosos «duros antiguos» que tanto darían que hablar.