Hace 7 años | Por --51656-- a diariodecuba.com
Publicado hace 7 años por --51656-- a diariodecuba.com

Morales González afirma que trabajaba para la naviera griega Nordstrand Maritime, contratado a través de la agencia estatal empleadora Selecmar, cuando un exceso de fuerza le provocó un sangramiento en la médula espinal y el padecimiento, llamado siringomielia, que ahora le impide trabajar.
Pide al Gobierno cubano una compensación. Según su versión, el colombiano Miguel Sánchez, funcionario del ITF, intercedió por él ante Selecmar, pero el director y el subdirector de esa entidad, Rafael Peraza Santiago y Armando Medina Remis, respectivamente, le respondieron que no le corresponde ninguna ayuda.
Es "una burla", dijo Morales González a DIARIO DE CUBA. "Las autoridades cubanas le expresaron al funcionario que no me correspondía la compensación porque mi enfermedad es degenerativa y no profesional; que a mí se me pagaba una pensión de por vida", añadió.
"Lo que ellos no le explicaron al inspector es que mi jubilación es de 270 pesos cubanos, equivalente a ocho dólares mensuales, habiéndome quitado durante 17 años el 80% de mi salario en dólares estadounidenses y de ese porciento el 12,5 era para la seguridad social. ¿Dónde está ese dinero que me corresponde por mi invalidez?", cuestionó.