Me ha venido como un flash, y si lo políticos en vez de programas, firmaran un contrato vinculativo en que plasmaran lo que nos prometen y si esto no lo cumplieran como en cualquier empresa, se les pudiera sancionar o mejor todavía despedir, dado que nosotros (los ciudadanos que les votamos) somos sus empleadores, primero podríamos hacer una de las cosas o ambas y después si ellos no están de acuerdo, pues como cada hijo de vecino se vayan a poner una denuncia/reclamación en el juzgado que corresponda y antes de eso a un acuerdo amistoso.
Creo que aunque seguro que no es la panacea, les daría que pensar para hacer todo lo que les apetece.
Comentarios
Pues eso ya sería mejor considerablemente el sistema y hacerlo menos estafador. Pero claro, a ver quién va a legislar algo así si precisamente el legislador es el político 😅