Como veo estos dos temas que veo muy repetidos por aquí, creo que no vendría mnal una puntualización, totalmente subjetiva
De veras, as mí me parece genial, maravilloso, que el conflicto catalán se internacionalice. No, no soy de los que quieren que la cosa se discuta aquí, a escondidas, y se tape. No soy de los que quieren lavar la ropa sucia en casa. Mi mayor aspiración , como la de Puigdemont, es que el ridículo alcance proporciones épicas y se conozca el tema a escala mundial, si puede ser. Y que cada cual se lleve su parte.
Porque la cuestión, señores, es saber al final quién hace el ridículo, y más aún, por qué, desde cuándo ya qué precio.
Hasta este momento, creo que el ridículo está muy repartido, aunque la balanza se decanta, me parece, a favor del Estado Español, que al ser más grande, es más patético y queda con el culo más al aire.
Ahora bien, tened en cuenta que lo que se ventila por ahí no es tanto si los catalanes tienen derecho a tener más autonomía o ya se les ha dado demasiada, y si su envalentonamiento no vendría de que se les han hecho demasiadas concesiones y habría que volver en cierto modo al centralismo. Todo esto viene muy bien, y quiero que se conozca más, en Alemania, en Tahilandia, y en América. Quiero que todo el mundo sepa lo que se ha concedido y lo que se ha obtenido con tanta concesión. Quiero que
Por eso yo quiero que le ridículo sea salvaje y la internacionalización completa. Porque antes que al independencia de Cataluña veremos el fin de las autonomías, al menos como hoy las conocemos.
Cada cual tiene su percepción, pro supuesto, pero al mía es que todo esto está engordando más al nacionalismo español que al catalán, y que una vez hayan engordado los dos, cada cual en su medida, veremos lo que pasa cuando el cántaro dé contra la piedra, o la piedra contra el cántaro.