Goliat mató a mi madre

Goliat tuvo la culpa.

Goliat mató a mi madre.

Pero no paro de castigarme

pensando que por qué

no fui capaz de asestarle

con la honda en la frente.

Goliat no es otra cosa

que nuestro sistema de salud.

Y yo no paro de pensar

que tendría que haber peleado más.

Que tendría que haberle dicho al médico:

"¡Mírenla, háganle pruebas para ver qué tiene!".

El caso es que lo hice,

pero no me hicieron caso.

Y vuelve el castigo:

"¡Más, tendría que haber insistido más!".

¿Pero por qué tenemos que insistir?

¿Por qué si la llevo al médico tengo que insistir

en que le hagan una cosa y otra?

¿No saben hacer su trabajo?

¿No quieren o no pueden?

¿En qué medida fue negligencia

o falta de medios?

¿A quién hay que lanzarle la honda?

Goliat mató a mi madre.

No fui capaz de derribarlo.

Sólo entre todos

podremos vencerlo.

Aclaración: Fue el día 8 de diciembre. Llevaba dos semanas con un dolor en la espalda. La llevamos a urgencias de Reina Sofía (Córdoba), a urgencias del ambulatorio de mi pueblo (Palma del Río), a su médico de cabecera, y la echaban para atrás, que era una contractura, una dorsalgia, un dolor muscular, que no tenía importancia, que tomase pastillas y ya se le quitaría. No le hicieron pruebas, sólo una radiografía tras insistir mucho. No dejo de repetirme que tendría que haber insistido más.