Si quiero mezclar piezas de una Thermomix y una PlayStation 3, para que de esa forma el aparato resultante salpique cuando mato zombies, lo puedo hacer sin cometer ningún delito.
Supongo que si luego intento patentar el monstruito, me dirán que vulnero las patentes de Thermomix y Sony, pero en mi casa hago con los zombies lo que quiero.
Los españoles tienen los políticos que se merecen. Si dejamos que los políticos nos quiten la calle, no podemos quejarnos. Yo sí estaré en la plaza del Rey.