Tres de cada cinco jugadores que acaban pidiendo dinero prestado, ya sea para financiar su adicción o para tapar los rotos que con ella causan en la economía familiar, no pueden devolverlo. Los préstamos no solo proceden de familiares, amigos y conocidos de los jugadores, que en ocasiones, y cada vez con más frecuencia, recurren a las casas de microcréditos. Algunas de ellas aplican intereses de hasta un 2.000% anual que obligan a quienes optan por esa vía de financiación a devolver en doce meses una cantidad veinte veces superior.
Comentarios
El juego, como cualquier droga.
Debería tener derecho a meterme lo que quiera, pero mejor no permitir anunciarlo y demás cosas que el juego sí puede pero el tabaco no.
#4 solo hay que ver el fútbol, escucharlo en la resi y leer los periódicos.
Cada 20 segundos anunciado apuestas.
El fútbol es un cáncer que se extiende sobre los más jóvenes.
en las proximas que voten a los mismos ladrones que disfrutan de todo lo que les han sacado El exministro Catalá ficha por Codere en plena ofensiva política contra el juego
El exministro Catalá ficha por Codere en plena ofe...
elconfidencial.com#1 de indultar a corruptos a las empresas de ludopatía. Gran ejemplo de lo que es un buen español de la derecha.
Ya es estúpido apostar, pero pedir créditos para apostar ya es de que te encierren y te estudien.
Una tía de mi marido nos ha salido binguera, desde hace muchos años y jubilada, dice que es con lo único que se distrae. Hace unos pocos años contrajo una deuda importante con un usurero de esos que pululan por los bingos. Cuando las hijas se enteraron pusieron las manos en la cabeza, fueron a visitar al usurero para saldar la deuda, se negó porque había que pagarle los intereses mes a mes. Lo pagaron pero también le quitaron las cuentas a la madre para controlarla.
Lo de “rayas de coca responsables” describe a la perfección la situación.