La receta de Alberto Chicote no es infalible. Varios restaurantes que ha visitado se quejan de los métodos que emplea el chef para intentar reflotar los negocios. De momento, dos de ellos ya han echado el cierre y un tercero ha cambiado de direccion
#4:
Sí... y los dos meses que llevaba la gente del Castro de Lugo sin cobrar, también culpa de Chicote.
O lo del Rafa, que resulta que sus clientes vienen por sus platos internacionales y les pone crema de sobre.
Lo que está claro es que por mucho que te vengan a dar 2,3,4 directrices, de poco va a servir si en cuanto las cámaras se vayan vuelves a hacer lo de siempre. Eso sí, la culpa siempre es de otros.
#13:
Pesadilla en la cocina está entretenido pero en mi opinión peca de estar demasiado guionizado. De todos modos las soluciones a las que se reduce el programa me parecen bastante superficiales y el guión es siempre el mismo. Limpieza-arreglo de cocina, reforma de local y cambio de carta. Pasan por alto el tema de personal, que es un tema delicado en estos tiempos que corren, pero fundamental para el funcionamiento de una empresa. En el domine cabra los dos hermanos me parecieron unos pésimos jefes, la chavala una diva y el tio un papanatas, ambos metiendole creo que excesiva caña a Mohamed. En el castro de lugo... bueno, lo primero era despedir a camareros y sobre todo a la cocinera. Puta calle, sin más. Y el jefe a cocinar para aprender sobre el negocio. En el Mejicano la socia subnormal también a la calle. Se le compra su parte y hasta nunca. En todos falla el factor humano y es un tema que no se toca, y al final es como hacerle chapa y pintura a un coche con la junta de culata a punto de quemar.
Sí... y los dos meses que llevaba la gente del Castro de Lugo sin cobrar, también culpa de Chicote.
O lo del Rafa, que resulta que sus clientes vienen por sus platos internacionales y les pone crema de sobre.
Lo que está claro es que por mucho que te vengan a dar 2,3,4 directrices, de poco va a servir si en cuanto las cámaras se vayan vuelves a hacer lo de siempre. Eso sí, la culpa siempre es de otros.
Pesadilla en la cocina está entretenido pero en mi opinión peca de estar demasiado guionizado. De todos modos las soluciones a las que se reduce el programa me parecen bastante superficiales y el guión es siempre el mismo. Limpieza-arreglo de cocina, reforma de local y cambio de carta. Pasan por alto el tema de personal, que es un tema delicado en estos tiempos que corren, pero fundamental para el funcionamiento de una empresa. En el domine cabra los dos hermanos me parecieron unos pésimos jefes, la chavala una diva y el tio un papanatas, ambos metiendole creo que excesiva caña a Mohamed. En el castro de lugo... bueno, lo primero era despedir a camareros y sobre todo a la cocinera. Puta calle, sin más. Y el jefe a cocinar para aprender sobre el negocio. En el Mejicano la socia subnormal también a la calle. Se le compra su parte y hasta nunca. En todos falla el factor humano y es un tema que no se toca, y al final es como hacerle chapa y pintura a un coche con la junta de culata a punto de quemar.
#13 Es que en principio el enfoque es de coaching. Evidentemente, todo tiene salvación bajo la premisa "echar a todo el mundo, cambiar el nombre al restaurante y abrir otra vez con gente más preparada", pero la idea es intentar enderezar a las personas. Si no, no tendría gracia. Lo que no significa que no tengas razón.
De todas formas, en muchos el factor humano que falla es el del propio dueño (en El Castro de Lugo se veía eso muy bien). Si el dueño es un inútil, mala solución hay.
#3 En este caso, es la palabra del dueño del bar contra la productora (o Chicote). Sinceramente, me resulta poco creíble. ¿Qué dueño de bar permitiría que su cocina apareciera en televisión hecha una mierda?
#5 Estos programas se grabaron en verano. Si cierran, no tiene nada que ver con la reacción ante la emisión del programa.
Como dicen, lo que marca este programa son los casos de éxito. Los de fracaso, que serán la mayoría, son lo habitual. Es dificilísimo cambiar a la gente que lleva un restaurante en una semana. Será interesante ver el típico programa especial dentro de un año en el que vuelven a restaurantes que sí han tenido éxito tras el cambio. En la versión americana lo hacen y es muy emotivo.
Pero, a ver, son restaurantes que YA estaban cerrados de facto. La jugada que hacen es clara: colaboran con el programa, les pagan una pasta, y después cierran igualmente.
“Lo que ha pasado es lo que hacía antes. Cuando Chicote se fue, trabajé con mi padre en el restaurante durante todo julio y agosto. El local iba como un tiro. Facturamos el doble que los dos veranos anteriores, pero yo al final me fui en septiembre, porque en el tiempo que estuve, yo me encargaba de todo y él solo venía a hacer la caja. Y te puedes imaginar, si facturábamos más, y encima en una época como en verano, las fiestas que se montaba eran aún más grandes”, declara Rafa a este portal.
A la pregunta de si a su padre le pidieron que la cocina no se limpiara en días antes de la llegada del equipo de grabación, Rafa lo niega en rotundo: “Lo de la cocina que dice mi padre, no es verdad. Os enviaría ahora mismo alguna foto para enseñar cómo está”.#3
Lo del Castro de Lugo era de pena. Un desastre de sitio. Lo del Domine Cabra se veía que o se ponían las pilas o en cuanto el padre falleciera, eso se iba a pique. Del Da Vinci no me acuerdo.
Supongo que lo de irse de farra hasta entre semana, meterse pelotazos (y lo que no se ve) durante el servicio y tener una vida privada totalmente desordenada nada tiene que ver con que tu negocio se vaya a la mierda. Es más fácil echarle la culpa a otro, que además te ha cambiado todo el mobiliario y decoración interior y exterior de tu restaurante.
Comentarios
Sí... y los dos meses que llevaba la gente del Castro de Lugo sin cobrar, también culpa de Chicote.
O lo del Rafa, que resulta que sus clientes vienen por sus platos internacionales y les pone crema de sobre.
Lo que está claro es que por mucho que te vengan a dar 2,3,4 directrices, de poco va a servir si en cuanto las cámaras se vayan vuelves a hacer lo de siempre. Eso sí, la culpa siempre es de otros.
#4, Spanish way of doing business
Pesadilla en la cocina está entretenido pero en mi opinión peca de estar demasiado guionizado. De todos modos las soluciones a las que se reduce el programa me parecen bastante superficiales y el guión es siempre el mismo. Limpieza-arreglo de cocina, reforma de local y cambio de carta. Pasan por alto el tema de personal, que es un tema delicado en estos tiempos que corren, pero fundamental para el funcionamiento de una empresa. En el domine cabra los dos hermanos me parecieron unos pésimos jefes, la chavala una diva y el tio un papanatas, ambos metiendole creo que excesiva caña a Mohamed. En el castro de lugo... bueno, lo primero era despedir a camareros y sobre todo a la cocinera. Puta calle, sin más. Y el jefe a cocinar para aprender sobre el negocio. En el Mejicano la socia subnormal también a la calle. Se le compra su parte y hasta nunca. En todos falla el factor humano y es un tema que no se toca, y al final es como hacerle chapa y pintura a un coche con la junta de culata a punto de quemar.
#13 Es que en principio el enfoque es de coaching. Evidentemente, todo tiene salvación bajo la premisa "echar a todo el mundo, cambiar el nombre al restaurante y abrir otra vez con gente más preparada", pero la idea es intentar enderezar a las personas. Si no, no tendría gracia. Lo que no significa que no tengas razón.
De todas formas, en muchos el factor humano que falla es el del propio dueño (en El Castro de Lugo se veía eso muy bien). Si el dueño es un inútil, mala solución hay.
"el equipo de ‘Pesadilla en la cocina’ le pidió que no la limpiara en unos días para poder grabar el programa"
UUUiiii ¡qué tramposillos!
#3 En este caso, es la palabra del dueño del bar contra la productora (o Chicote). Sinceramente, me resulta poco creíble. ¿Qué dueño de bar permitiría que su cocina apareciera en televisión hecha una mierda?
#5 Estos programas se grabaron en verano. Si cierran, no tiene nada que ver con la reacción ante la emisión del programa.
Como dicen, lo que marca este programa son los casos de éxito. Los de fracaso, que serán la mayoría, son lo habitual. Es dificilísimo cambiar a la gente que lleva un restaurante en una semana. Será interesante ver el típico programa especial dentro de un año en el que vuelven a restaurantes que sí han tenido éxito tras el cambio. En la versión americana lo hacen y es muy emotivo.
#10 Lo raro es que no los cierren antes.
Pero, a ver, son restaurantes que YA estaban cerrados de facto. La jugada que hacen es clara: colaboran con el programa, les pagan una pasta, y después cierran igualmente.
Al final parece que Chicote sí ayudó y el Rafa Soler éste es un Pocholo resentido:
http://www.vertele.com/noticias/chicote-dio-el-200-pero-mi-padre-le-culpa-para-echar-balones-fuera/
“Lo que ha pasado es lo que hacía antes. Cuando Chicote se fue, trabajé con mi padre en el restaurante durante todo julio y agosto. El local iba como un tiro. Facturamos el doble que los dos veranos anteriores, pero yo al final me fui en septiembre, porque en el tiempo que estuve, yo me encargaba de todo y él solo venía a hacer la caja. Y te puedes imaginar, si facturábamos más, y encima en una época como en verano, las fiestas que se montaba eran aún más grandes”, declara Rafa a este portal.
A la pregunta de si a su padre le pidieron que la cocina no se limpiara en días antes de la llegada del equipo de grabación, Rafa lo niega en rotundo: “Lo de la cocina que dice mi padre, no es verdad. Os enviaría ahora mismo alguna foto para enseñar cómo está”. #3
¿Un restaurante acepta que saquen por la tele toda la mierda que tienen y eso les cuesta el cierre? Nunca lo hubiese imaginado.
#5 Algunos estaban ya cerrados el día de la emisión del programa. Por lo que la causalidad que señalas no es cierta (aunque debería serlo).
Lo del Castro de Lugo era de pena. Un desastre de sitio. Lo del Domine Cabra se veía que o se ponían las pilas o en cuanto el padre falleciera, eso se iba a pique. Del Da Vinci no me acuerdo.
Tele basura. Lo sabes (o deberías) firmas con ella y encima te quejas. Increíble e impresionante.
Algún dueño lo que necesita es una cura de rehabilitación.
Es como supernany... en cuanto sale por la puerta, volvemos a la situación anterior.
Supongo que lo de irse de farra hasta entre semana, meterse pelotazos (y lo que no se ve) durante el servicio y tener una vida privada totalmente desordenada nada tiene que ver con que tu negocio se vaya a la mierda. Es más fácil echarle la culpa a otro, que además te ha cambiado todo el mobiliario y decoración interior y exterior de tu restaurante.
Coño! este tío es como Pilar Rubio!!! sitio por donde pasa sitio que cierra.
Spanish business plan
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