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#2:
Todo el mundo teme que Grecia va a suspender los pagos de su deuda nacional. En realidad, eso no es ninguna novedad. Se ha estimado que desde su independencia de los otomanos en 1832 Grecia ha estado en suspensión de pagos o reestructurándolos durante la mitad de ese periodo. La novedad es que esta vez Alemania está dispuesta a rescatarla.
Desde el comienzo de la crisis de la eurozona se ha vuelto un lugar común considerar a los alemanes estrechos de miras, tacaños y dogmaticamente apegados a sus recetas de austeridad como remedio de los males de Europa. Estas críticas son enormemente exageradas. Hay que recordar que lo que se le pide a Alemania es que use el dinero de sus contribuyentes - en una democracia - para rescatar a un país como Grecia, culpable de mala gestión, baja competitividad y fraude financiero ¡Y ha dicho que sí! Y como recompensa en los periódicos griegos se llama nazis a los alemanes.
Alemania ha sido uno de los países organizadores, y el mayor contribuyente, del Fondo de Estabilidad Financiero Europeo, que reúne unos asombrosos 726.000 millones de euros (924.000 millones de dólares). Esa cifra aumentará y, combinada con fondos y préstamos anteriores, la parte de Alemania superará facilmente el total de los impuestos federales ingresados en un año. Imaginemos que Estados Unidos estuviera dispuesto a garantizar más de dos billones de dólares para rescatar a Méjico.
Se habla mucho de la oposición del público alemán a ayudar a los países del sur de Europa. Lo sorprendente, dada la escala de la ayuda alemana, es que la oposición sea tan escasa. Este mes el Parlamento ratificará facilmente varios de estos mecanismos de financiación y un nuevo impuesto sobre las transacciones financieras para pagarlos parcialmente (los alemanes tienen esa idea conservadora y chapada a la antigua de que si uno gasta dinero debería pagar sus facturas) A fines de febrero uno de los paquetes de rescate fue aprobado por el Parlamento alemán por 496 a 90. El gobierno alemán también ha relajado su antaño rígida oposición a una política monetaria más agresiva. Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo, no habría podido proporcionar préstamos baratos a los bancos europeos - evitando con ello una crisis a lo Lehman Brothers - sin la aprobación alemana.
Hay un agitado debate político acerca de si los Estados Unidos necesitan medidas de austeridad en este momento (yo diría que no). Pero Grecia y los otros países débiles de la eurozona tienen pocas alternativas. Los mercados son reluctantes a prestarles dinero a causa del peso cada vez mayor de sus deudas. Fue en respuesta a genuinas presiones del mercado que estos gobiernos empezaron a poner orden en sus presupuestos. Los programas de austeridad ponen demasiado poco énfasis en el crecimiento, pero si estas naciones hubieran gastado dinero alocadamente, los intereses que pagan se hubieran disparado. Aún más importante, los alemanes no han puesto tanto énfasis en la austeridad como en las reformas estructurales - apertura de los mercados de trabajo, liberalización de sectores económicos y desmantelamiento de barreras proteccionistas (Nota del traductor: no estoy seguro de esta última frase). Lo que economías como Grecia necesitan de verdad es menos austeridad y más reformas. La lección de la mayoría de las crisis de deuda es que los países que implementan estos cambios en definitiva se hacen más competitivos.
El sur de Europa tiene que recorrer un largo camino en este aspecto. El Banco Mundial en sus estadísticas sobre la facilidad para hacer negocios sitúa a Italia y Grecia en los dos últimos puestos de los países desarrollados (30º y 31º). El Foro Económico Mundial clasifica a Grecia e Italia en los puestos 125º y 126º en flexibilidad para contratar y despedir, 133º y 140º (¡de un total de 142!) en cuanto al peso de las regulaciones estatales. La recaudación de impuestos es casi inexistente en ambos países y la corrupción, rampante.
Gracias en gran parte a los subsidios de la Unión Europea (léase: Alemanes) durante los últimos 10 años los salarios han crecido dramaticamente en el sur de Europa. Los costes salariales untiarios en Grecia crecieron un 35% entre 2000 y 2010. En Alemania subieron un 2%.
Los líderes alemanes han declarado una y otra vez que están dispuestos a rescatar a los países débiles de la eurozona. Pero han exigido reformas a cambio de su ayuda. La canciller alemana Angela Merkel se opone a una solución dramática como los eurobonos no por su coste - Alemania va a acabar pagando más - sino porque eliminarían la presión para hacer reformas. La única influencia que Alemania tiene con países como Grecia es entrgar el dinero gradualmente a medida que implanten reformas.
A pesar de todo es posible que Grecia tenga que suspender pagos y abandonar la eurozona. Su problema de competitividad es sencillamente demasiado grande, su liderazgo político demasiado débil. Pero si toma ese camino Grecia descubrirá que los mercados se niegan a prestarle dinero a intereses razonables si no hace las mismas cosas que Alemania le está pidiendo. La vida sin Alemania puede significar mucha más austeridad que la vida con Alemania.
Fareed Zakaria
Desde el comienzo de la crisis de la eurozona se ha vuelto un lugar común considerar a los alemanes estrechos de miras, tacaños y dogmaticamente apegados a sus recetas de austeridad como remedio de los males de Europa. Estas críticas son enormemente exageradas. Hay que recordar que lo que se le pide a Alemania es que use el dinero de sus contribuyentes - en una democracia - para rescatar a un país como Grecia, culpable de mala gestión, baja competitividad y fraude financiero ¡Y ha dicho que sí! Y como recompensa en los periódicos griegos se llama nazis a los alemanes.
Alemania ha sido uno de los países organizadores, y el mayor contribuyente, del Fondo de Estabilidad Financiero Europeo, que reúne unos asombrosos 726.000 millones de euros (924.000 millones de dólares). Esa cifra aumentará y, combinada con fondos y préstamos anteriores, la parte de Alemania superará facilmente el total de los impuestos federales ingresados en un año. Imaginemos que Estados Unidos estuviera dispuesto a garantizar más de dos billones de dólares para rescatar a Méjico.
Se habla mucho de la oposición del público alemán a ayudar a los países del sur de Europa. Lo sorprendente, dada la escala de la ayuda alemana, es que la oposición sea tan escasa. Este mes el Parlamento ratificará facilmente varios de estos mecanismos de financiación y un nuevo impuesto sobre las transacciones financieras para pagarlos parcialmente (los alemanes tienen esa idea conservadora y chapada a la antigua de que si uno gasta dinero debería pagar sus facturas) A fines de febrero uno de los paquetes de rescate fue aprobado por el Parlamento alemán por 496 a 90. El gobierno alemán también ha relajado su antaño rígida oposición a una política monetaria más agresiva. Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo, no habría podido proporcionar préstamos baratos a los bancos europeos - evitando con ello una crisis a lo Lehman Brothers - sin la aprobación alemana.
Hay un agitado debate político acerca de si los Estados Unidos necesitan medidas de austeridad en este momento (yo diría que no). Pero Grecia y los otros países débiles de la eurozona tienen pocas alternativas. Los mercados son reluctantes a prestarles dinero a causa del peso cada vez mayor de sus deudas. Fue en respuesta a genuinas presiones del mercado que estos gobiernos empezaron a poner orden en sus presupuestos. Los programas de austeridad ponen demasiado poco énfasis en el crecimiento, pero si estas naciones hubieran gastado dinero alocadamente, los intereses que pagan se hubieran disparado. Aún más importante, los alemanes no han puesto tanto énfasis en la austeridad como en las reformas estructurales - apertura de los mercados de trabajo, liberalización de sectores económicos y desmantelamiento de barreras proteccionistas (Nota del traductor: no estoy seguro de esta última frase). Lo que economías como Grecia necesitan de verdad es menos austeridad y más reformas. La lección de la mayoría de las crisis de deuda es que los países que implementan estos cambios en definitiva se hacen más competitivos.
El sur de Europa tiene que recorrer un largo camino en este aspecto. El Banco Mundial en sus estadísticas sobre la facilidad para hacer negocios sitúa a Italia y Grecia en los dos últimos puestos de los países desarrollados (30º y 31º). El Foro Económico Mundial clasifica a Grecia e Italia en los puestos 125º y 126º en flexibilidad para contratar y despedir, 133º y 140º (¡de un total de 142!) en cuanto al peso de las regulaciones estatales. La recaudación de impuestos es casi inexistente en ambos países y la corrupción, rampante.
Gracias en gran parte a los subsidios de la Unión Europea (léase: Alemanes) durante los últimos 10 años los salarios han crecido dramaticamente en el sur de Europa. Los costes salariales untiarios en Grecia crecieron un 35% entre 2000 y 2010. En Alemania subieron un 2%.
Los líderes alemanes han declarado una y otra vez que están dispuestos a rescatar a los países débiles de la eurozona. Pero han exigido reformas a cambio de su ayuda. La canciller alemana Angela Merkel se opone a una solución dramática como los eurobonos no por su coste - Alemania va a acabar pagando más - sino porque eliminarían la presión para hacer reformas. La única influencia que Alemania tiene con países como Grecia es entrgar el dinero gradualmente a medida que implanten reformas.
A pesar de todo es posible que Grecia tenga que suspender pagos y abandonar la eurozona. Su problema de competitividad es sencillamente demasiado grande, su liderazgo político demasiado débil. Pero si toma ese camino Grecia descubrirá que los mercados se niegan a prestarle dinero a intereses razonables si no hace las mismas cosas que Alemania le está pidiendo. La vida sin Alemania puede significar mucha más austeridad que la vida con Alemania.
Fareed Zakaria
#6:
No. Lo que ocurre es que Alemania ha dicho sí a que SUS contribuyentes rescaten a SUS bancos, que entrarían en quiebra si los griegos dejasen de pagar los prestamos que pidieron para pagar productos alemanes.
Es lo que se llama deuda ilícita.
Es lo que se llama deuda ilícita.
Comentarios
Todo el mundo teme que Grecia va a suspender los pagos de su deuda nacional. En realidad, eso no es ninguna novedad. Se ha estimado que desde su independencia de los otomanos en 1832 Grecia ha estado en suspensión de pagos o reestructurándolos durante la mitad de ese periodo. La novedad es que esta vez Alemania está dispuesta a rescatarla.
Desde el comienzo de la crisis de la eurozona se ha vuelto un lugar común considerar a los alemanes estrechos de miras, tacaños y dogmaticamente apegados a sus recetas de austeridad como remedio de los males de Europa. Estas críticas son enormemente exageradas. Hay que recordar que lo que se le pide a Alemania es que use el dinero de sus contribuyentes - en una democracia - para rescatar a un país como Grecia, culpable de mala gestión, baja competitividad y fraude financiero ¡Y ha dicho que sí! Y como recompensa en los periódicos griegos se llama nazis a los alemanes.
Alemania ha sido uno de los países organizadores, y el mayor contribuyente, del Fondo de Estabilidad Financiero Europeo, que reúne unos asombrosos 726.000 millones de euros (924.000 millones de dólares). Esa cifra aumentará y, combinada con fondos y préstamos anteriores, la parte de Alemania superará facilmente el total de los impuestos federales ingresados en un año. Imaginemos que Estados Unidos estuviera dispuesto a garantizar más de dos billones de dólares para rescatar a Méjico.
Se habla mucho de la oposición del público alemán a ayudar a los países del sur de Europa. Lo sorprendente, dada la escala de la ayuda alemana, es que la oposición sea tan escasa. Este mes el Parlamento ratificará facilmente varios de estos mecanismos de financiación y un nuevo impuesto sobre las transacciones financieras para pagarlos parcialmente (los alemanes tienen esa idea conservadora y chapada a la antigua de que si uno gasta dinero debería pagar sus facturas) A fines de febrero uno de los paquetes de rescate fue aprobado por el Parlamento alemán por 496 a 90. El gobierno alemán también ha relajado su antaño rígida oposición a una política monetaria más agresiva. Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo, no habría podido proporcionar préstamos baratos a los bancos europeos - evitando con ello una crisis a lo Lehman Brothers - sin la aprobación alemana.
Hay un agitado debate político acerca de si los Estados Unidos necesitan medidas de austeridad en este momento (yo diría que no). Pero Grecia y los otros países débiles de la eurozona tienen pocas alternativas. Los mercados son reluctantes a prestarles dinero a causa del peso cada vez mayor de sus deudas. Fue en respuesta a genuinas presiones del mercado que estos gobiernos empezaron a poner orden en sus presupuestos. Los programas de austeridad ponen demasiado poco énfasis en el crecimiento, pero si estas naciones hubieran gastado dinero alocadamente, los intereses que pagan se hubieran disparado. Aún más importante, los alemanes no han puesto tanto énfasis en la austeridad como en las reformas estructurales - apertura de los mercados de trabajo, liberalización de sectores económicos y desmantelamiento de barreras proteccionistas (Nota del traductor: no estoy seguro de esta última frase). Lo que economías como Grecia necesitan de verdad es menos austeridad y más reformas. La lección de la mayoría de las crisis de deuda es que los países que implementan estos cambios en definitiva se hacen más competitivos.
El sur de Europa tiene que recorrer un largo camino en este aspecto. El Banco Mundial en sus estadísticas sobre la facilidad para hacer negocios sitúa a Italia y Grecia en los dos últimos puestos de los países desarrollados (30º y 31º). El Foro Económico Mundial clasifica a Grecia e Italia en los puestos 125º y 126º en flexibilidad para contratar y despedir, 133º y 140º (¡de un total de 142!) en cuanto al peso de las regulaciones estatales. La recaudación de impuestos es casi inexistente en ambos países y la corrupción, rampante.
Gracias en gran parte a los subsidios de la Unión Europea (léase: Alemanes) durante los últimos 10 años los salarios han crecido dramaticamente en el sur de Europa. Los costes salariales untiarios en Grecia crecieron un 35% entre 2000 y 2010. En Alemania subieron un 2%.
Los líderes alemanes han declarado una y otra vez que están dispuestos a rescatar a los países débiles de la eurozona. Pero han exigido reformas a cambio de su ayuda. La canciller alemana Angela Merkel se opone a una solución dramática como los eurobonos no por su coste - Alemania va a acabar pagando más - sino porque eliminarían la presión para hacer reformas. La única influencia que Alemania tiene con países como Grecia es entrgar el dinero gradualmente a medida que implanten reformas.
A pesar de todo es posible que Grecia tenga que suspender pagos y abandonar la eurozona. Su problema de competitividad es sencillamente demasiado grande, su liderazgo político demasiado débil. Pero si toma ese camino Grecia descubrirá que los mercados se niegan a prestarle dinero a intereses razonables si no hace las mismas cosas que Alemania le está pidiendo. La vida sin Alemania puede significar mucha más austeridad que la vida con Alemania.
Fareed Zakaria
#7 lo he entendido muy bien y me sigue pareciendo pura propaganda para limpiar la imagen de Alemania además de falaz e incorrecto:
1-> La benevolente Alemania está usando el dinero de sus contribuyentes para dárselo a Grecia
El Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (los asombrosos 726.000 millones de euros) no son de Alemania, Una parte está financiada por los mercados a través de préstamos del Mecanismo Europeo de Estabilidad Presupuestaria (Con la Comisión Europea como recaudador y el presupuesto de la UE como garantía), otra parte la pone el FMI (250 mil millones) y otra parte la ponen los Estados miembros de la UE siguiendo criterios de proporcionalidad económica.
2-> Según el autor, el contribuyente alemán debería de estar mucho más cabreado por que está siendo sangrado por los malvados vagos del sur.
¿De verdad hace falta explicar quién ha sido el Gran beneficiario de la unión monetaria? http://porantonomasia.wordpress.com/2010/05/18/%C2%BFque-gana-alemania-estando-en-la-union-europea/
3-> Gracias en gran parte a los subsidios de la Unión Europea (léase: Alemanes)
Demagogia barata. Los Fondos Estructurales europeos son una parte del presupuesto de la UE y como todos sabemos a la UE contribuyen todos los países miembros en función de su situación económica. Si bien Alemania ha sido la que más ha aportado en términos absolutos y relativos durante mucho tiempo también ha obtenido beneficios a cambio (tanto económicos como de influencia en las políticas agrarias o pesqueras).
4-> La excusa de los Eurobonos. El autor dice que Alemania va a pagar más sin ellos y que solamente se opone porque es su único medio de presión para que los países más débiles hagan reformas estructurales.
Sabes cuánto le cuesta financiarse en los mercados a Alemania? Sabes cuánto a los países con problemas? A España le cuesta un 4,75% más a Portugal el 10% y a Grecia casi un 30% más que a Alemania. Te recuerdo que Portugal y Grecia ya han sido rescatados y aún así su prima de riesgo sigue disparada. Mi pregunta es ¿Compensa la perdida de soberanía (tanto política como económica) de los países rescatados cuando todos podríamos financiarnos a un mismo interés y acometer las reformas necesarias sin necesidad de que Alemania mande? ¿De verdad no existe otro mecanismo en la UE para pactar las reformas que Alemania pegando un puñetazo en la mesa y diciendo a todos lo que tienen que hacer? ¿Qué legitimidad tienen? ¿Es esta la Europa que queremos?
5-> #7 Grecia ya recibe ayuda del FMI desde el primer rescate a través del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera y por vía directa. El plan de recortes ha sido pactado por el FMI, Alemania y el resto de los Estados miembros. ¿Te parece poquita cosa lo de Grecia? ¿Crees que los Griegos están en la calle por gusto? Lo único que se pide es que las reformas y los ajustes sean GRADUALES para no hundir a las gentes del país en la miseria más absoluta de la noche a la mañana.
#15 A ver, que no, Alemania no necesita a Grecia para nada. Hay que estar rematadamente intoxicado para creerse esas chorradas (y de paso ser muy ignorante)
Alemania era el mayor exportador del mundo hasta el año pasado que le superó China. Es una potencia por sí misma, lo era antes de la UE.
Podrían haber dejado caer a Grecia y seguir con su vida y les iría mejor.
#17 sales a insulto por comentario. Aquí el único que no se entera, que está intoxicado y que es un ignorante eres tú. Además, como parece que te gusta, pues toma negativo y sigue revolcándote en tu mierda.
#18 El problema de meneame es que sois muchos jóvenes que os creéis la primera tontería que os sueltan.
Lee libros o alguna página seria.
No. Lo que ocurre es que Alemania ha dicho sí a que SUS contribuyentes rescaten a SUS bancos, que entrarían en quiebra si los griegos dejasen de pagar los prestamos que pidieron para pagar productos alemanes.
Es lo que se llama deuda ilícita.
#6 Gracias por los negativos, a eso se le llama debatir civilizadamente... y por cierto ¿Qué gana Alemania gastando el dinero no directamente en rescatar a SUS bancos, sino en rescatar a Grecia para que en un futuro pueda volver a engañar a la Unión? No tiene el menor sentido.
#6 Más ilícito y odioso son los negativos que pones con esa alegría.
#8 Du / du hast/ du hast mich/... du hast mich VIEL GELD GEBORGT.
Me he molestado en buscar el volumen de las exportaciones alemanas a Grecia. En 2011 apenas superaron los 5.000 millones de euros... y eso es el volumen, no los beneficios, que sería una cifra mucho más baja
http://www.unionrhs.gr/_En_/modules/news/article.php?storyid=756
Decir que Alemania está dispuesta a rescatar a Grecia para proteger su comercio exterior es sencillamente delirante. Ha gastado ya más de lo que probablemente ganaría en 100 años enteros de exportaciones a Grecia.
#12
min 5:10
#12 Y eso era noticia porque habían reducido un 13% las exportaciones, grecia ha gastado gran parte de esa macrodeuda en comprar bienes a alemania durante las vacas gordas y se lo han prestado bancos germanos... El tema del despilfarro y la corrupción ya se conocía antes de que los bancos alemanes empezaran a prestar sin freno a grecia. Los alemanes solo quieren asegurarse de que cobran, aunque tengan que hundir totalmente a Grecia.
Demasiado alemanocéntrico el artículo, hasta donde yo sé la aportación a los fondos de rescate sigue algún que otro criterio de proporcionalidad. Es una falacia decir que Alemania está dispuesta a salvar a Grecia porque es toda la Unión Europea en su conjunto la que pone la pasta.
#5 No parece que hayas entendido nada del artículo ni en general.
Si a Alemania se le ocurre decir "al cuerno con los griegos" ahora Grecia estaría pidiendo limosna al FMI a cambio de recortes mucho más duros.
Continuo con mi propia opinión, que es que en efecto los alemanes han sido estrechos de miras y dogmáticos, pero todo lo contrario de mezquinos o tacaños... sobre todo si hablamos de Grecia, que al contrario que Irlanda y Portugal (o España e Italia) cometió fraude masivo organizado desde el mismísimo gobierno de Atenas.
Creo que la política alemana es equivocada, especialmente cuando rechaza la creación de soluciones permanentes como un Tesoro europeo y unos impuestos europeos, pero nos están diciendo con demasiada frecuencia que es malvada. Y eso si que no es aceptable y está haciendo mucho daño.
Por cierto, este es un punto de vista neutral, de un intelectual estadounidense.
Los alemanes no pueden escapar a su pasado luterano. BBC 25/3/2012
Hace exactamente 500 años, uno de los más grandes pensadores europeos cada vez estaba más preocupado de que el dinero alemán estaba siendo dilapidado.
El dinero recaudado iba hacia el Mediterrano, para subvencionar a un puñado de extranjeros de mal comportamiento.
Este pensador alemán del siglo XVI era Martín Lutero y estaba desesperado por seguir siendo parte de ese gran proyecto europeo conocido como Iglesia Católica Romana; sin embargo, al mismo tiempo estaba también desesperado de no sustentar a aquellos que esquilmaban a los creyentes alemanes para poder construir la catedral de San Pedro en Roma.
La injusticia de los abusos alimento un resentimiento popular hasta que la paciencia alemana finalmente saltó. Lutero rompió con su querida Iglesia Católica, "protestantdo" en esa gran rebelión que conocemos como la creación del Protestantismo, la Reforma.
Hoy en día, los alemanes (incluidos aquellos que son católicos o no-cristianos) no pueden escapar a su pasado luterano.
(...)
http://www.bbc.co.uk/news/magazine-17489035
#3 Te votaría positivo pero me he quedado sin carma en este páramo propagandístico y mediocrizante en el que se ha convertido rojéame.net.
Alemania es una ONG y no está consiguiendo ningún beneficio del euro. Todo por culpa de esos sureños vagos irlandeses y griegos.
Du hast mich (Ramstein)
Tu eres tonto, y el que escribió esto más.
Alemania no le ha dado dinero gratis a Grecia... le ha obligado a comprar armamento y submarinos. Europa nunca existió.