Hace 11 años | Por commentator a lavanguardia.com
Publicado hace 11 años por commentator a lavanguardia.com

El Centro de Estudio de Riesgo Existencial, perteneciente a la Universidad de Cambridge, tiene previsto estudiar los riesgos de que la tecnología acabe con el ser humano en un futuro. En concreto, el CSER va a investigar los peligros que suponen para el hombre nuevos campos como la biotecnología, la vida artificial, la nanotecnología y el cambio climático como resultado de la actividad del ser humano. "Muchos científicos están preocupados porque los desarrollos de la tecnología humana podrían suponer pronto nuevos peligros de extinción humana".

Comentarios

Chordy

Bah, eso se soluciona implantando tres sencillas leyes en sus cerebros positrónicos.

Robus

#3 A los diez minutos, el hacker de turno a petición del político de turno habría, si no modificado las leyes, modificado que se entiende por "humano" en esas leyes.

Fijo!

m

#3 Es que los que debían instalar tales cerebros carecen de cerebro en absoluto.

flekyboy

Ya sospechaba yo que la tostadora lo hacía aposta para asustarme cada vez...

Homertron3

Actualmente ya se están usando robots contra los humanos, aunque de momento esos robots son dirigidos por humanos... tiempo al tiempo.

Si yo fuera un robot tendría un casino, y furcias! Es más, podéis quedaros con el casino.

Robus

#1 Ya hay unos robots vigilando la frontera surcoreana fabricados por Samsung que son capaces de disparar ametralladoras contra blancos moviles que se aproximen desde corea del norte.

Salió en un reportaje por la tele que no he sido capaz de recuperar...

p

#1 El salto tecnológico entre eso y lo que se estudia en lo que dice la noticia no es trivial. Yo diría que estamos extremadamente lejos de algo así (pero mucho muchísimo, sin importar lo que quiera creer alguna gente para alimentar sus fantasías). Otra cosa es que los militares empiecen a poner robots que disparen a todo lo que se mueva, pero eso yo no lo catalogaría de "rebelión", sino de ataque militar indiscriminado.
Para empezar, una rebelión implicaría máquinas inteligentes y conscientes con capacidad de raciocinio y conciencia de clase, y esto, hoy por hoy, ni está ni se le espera (y quien así lo afirme es que oyó campanas y no sabe dónde).
La IA hoy en día no dejan de ser algoritmos más currados para resolver problemas concretos, que están muy lejos de ni siquiera aspirar a imitar un pensamiento inteligente de verdad. Se lleva en este estado más de 60 años sin ninguna sorpresa que haga pensar que se va a resolver mañana.