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#4:
Aunque sobran las palabras, ahí va un consejo de alguien que ha pasado por eso:
No eduquéis a vuestros hijos para que se adapten al papel de víctimas.
Ya sea víctimas de acosadores, de la presión social para encajar en el Sistema, o víctimas de un sistema político y económico violento y descarnado.
Tenéis que enseñarles lo que ellos valen, así como defenderse entre ellos y a sí mísmos, a través de todos los medios, aunque la violencia sea uno de ellos.
Y no me vengáis con monsergas buenrrollistas sobre la violencia, que esas ya me las sé porque las he tenido que oír de labios de gente que no ha sido acosada en la infancia.
Porque los torturadores y dictadores no conocen edad, clase, sexo ni condición indispensable alguna.
No eduquéis a vuestros hijos para que se adapten al papel de víctimas.
Ya sea víctimas de acosadores, de la presión social para encajar en el Sistema, o víctimas de un sistema político y económico violento y descarnado.
Tenéis que enseñarles lo que ellos valen, así como defenderse entre ellos y a sí mísmos, a través de todos los medios, aunque la violencia sea uno de ellos.
Y no me vengáis con monsergas buenrrollistas sobre la violencia, que esas ya me las sé porque las he tenido que oír de labios de gente que no ha sido acosada en la infancia.
Porque los torturadores y dictadores no conocen edad, clase, sexo ni condición indispensable alguna.
Comentarios
Aunque sobran las palabras, ahí va un consejo de alguien que ha pasado por eso:
No eduquéis a vuestros hijos para que se adapten al papel de víctimas.
Ya sea víctimas de acosadores, de la presión social para encajar en el Sistema, o víctimas de un sistema político y económico violento y descarnado.
Tenéis que enseñarles lo que ellos valen, así como defenderse entre ellos y a sí mísmos, a través de todos los medios, aunque la violencia sea uno de ellos.
Y no me vengáis con monsergas buenrrollistas sobre la violencia, que esas ya me las sé porque las he tenido que oír de labios de gente que no ha sido acosada en la infancia.
Porque los torturadores y dictadores no conocen edad, clase, sexo ni condición indispensable alguna.
#4 No hombre no, las flores vencen a las balas... lo he visto por la tele
#5 deben ser flores muy duras, afiladas, y veloces
#4 aunque estoy de acuerdo en parte, creo que el gran problema está en la "mayoría silenciosa", los que no intervienen. Sí el acosador se siente " rechazado " por acosar, no haría falta entrar en una espiral de violencia (porque, además, la víctima no siempre puede defenderse).
En finlandia están utilizando una metodología basada en la participación, no sólo de la víctima y del acosador, sino de todo el conjunto de los alumnos, es decir, la mayoría silenciosa, con notable éxito.
#14 a eso me refiero cuando digo que tenemos que enseñarle no solo a que se defiendan por si mismos sino también a los demás, entre ellos.
Como los reinos griegos en las guerras médicas: Unirse momentáneamente para restaurar el orden.
Gracias por la info no sabía lo de Finlandia
Hay una solución infalible: educar contra el acoso. Lástima que en los últimos años se hayan dedicado a desmantelar la educación como medida preventiva...
#1 Voy a contar cuantos (lamentablemente) comentan que el acoso se soluciona con una hostia a tiempo al acosador
Y deseo de verdad tener que tragarme este comentario
#2 ¿Has sufrido acoso en la infancia?
#7 No, entendido como tal. En algún caso, alguien que se dedicó durante una temporada a bombardearme con una cerbatana-bic y a llamarme con un mote que me molestaba, pero no me parece que se pueda considerar acoso
#2 Me has dejado intrigado; ¿por qué, según tú, es lamentable que alguien piense que una posible solución es una hostia a tiempo?
#10 ¿De verdad eres de los que piensan que en algún caso la violencia puede ser solución? Lo siento, especialmente por ti y por tu entorno
#11 Yo no he dicho lo que pienso, he preguntado por qué crees que es, en tus palabras, lamentable.
Pregunta que, obviando tu paternalismo y condescendencia, no has contestado. Como esa sea tu forma de dialogar siempre yo sí que lo siento por tu entorno.
#1 No estoy de acuerdo. La medida efectiva es ir a por los padres y los profesores. Ya verías como se preocuparían de educar contra el acoso en casa.
Que yo recuerde (y he ido al colegio en los 80) nunca hubo esa educación contra el acoso, ni antes ni después de los recortes.
De esto: "Os digo esto porque yo no aguanto ir al colegio y no hay otra manera para no ir. Por favor espero que algún día podáis odiarme un poquito menos", a decir que parece inequívoco que sufría acoso... No sé. En toda esta historia de Diego veo un salto en la lectura de los acontecimientos que no pillo, la verdad.
#9 a mi tb me pasa... Tengo la sensación de que no sólo eran los alumnos el problema.
Yo también fui a un colegio religioso, de curas concretamente y he de decir una cosa, los profesores curas (habia unos cuantos que no lo eran) tenían la mala costumbre de humillar con palabras a algún compañero por lo que fuese, a un compañero porque no recordaba que el símbolo del Oro es Au, en lugar de por su nombre, uno de los profesores le empezó a llamar Au, pero con tono de decirlo un deficiente mental, éso se generalizó y el pobre chaval lo pasó fatal. Otro, contestó mal una pregunta y se sonrojó por ello y como era muy pálido, digamos que se puso rosa, y ya tuvimos "cochinillo" para años. Inclusó a mí me lo hizo otro, llevaba un calendario de cartera para marcar la página del libro en la que íbamos, y la foto era de estas de bebes que estaban tan de moda hace unos años y el crío salía metido en una olla de spaguetis y medio cubierto por ellos, el profesor me lo vió y como estaba un poco gordita, lo cogió y con él bien en alto, me empezó a preguntar que si era yo de pequeña, que no le extrañaba que ahora estuviera así y un montón de cosas más al respecto, no se me va a olvidar en la vida, Julio Gil se llamaba.
Así que no descarto que todo empezara por un comentario de un profesor y todos le siguieran la "coña".
Todos contra el acoso