La policía irlandesa ha desarticulado esta mañana una red de prostitución de sacerdotes que operaba en las ciudades de Cork y Dublín. Al parecer, todos los detenidos son jóvenes de entre 15 y 19 años, que llevaban a cabo sus actividades bajo la tapadera de un grupo de Scouts. Según ha confirmado un portavoz de la policía, la red operaba mediante el sistema "puerta a puerta", ofreciendo servicios sexuales de sacerdotes a clientes homosexuales, preferiblemente de raza africana o similares. "Comenzaban vendiendo dulces variados, tanteaban el terreno y acababan ofreciendo un encuentro sexual con uno de los párrocos".
La alarma saltó cuando un jóven de 18 años llamó al servicio de desatascado de desagües. El operario observó que existía un taponamiento de una de las tuberías provocado por depósitos fecales de un grosor "fuera de lo común", además de un fuerte olor a incienso que impregnaba toda la dependencia. Tras la denuncia, un equipo de asalto se personó en el local y liberaron a 32 sacerdotes que vivían en condiciones insalubres. "Para evitar que se fugaran los convertían en adictos, en ocasiones al opio pero principalmente a la pornografía", ha declarado un portavoz de la policía, que relata el horror sufrido por los clérigos "ya que tenían prohibido colgar crucifijos en la pared".
Dos de los jóvenes se encuentran ya en libertad provisional mientras la investigación arroja más luz sobre el asunto, si bien no se espera que los menores pasen a disposición judicial ya que es probable que "simplemente se limitaran a provocar a los curas y éstos hayan decidido actuar dada la situación".
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Superior. Esplendida.